El presidente del Concejo, Rafael Meza, del Partido Conservador; y el vicepresidente César Pión, de La U, presidieron el acto de rendición de cuentas públicas de la corporación en lo que va del año, de acuerdo al reglamento interno y las normas respectivas.
Los asesores de las comisiones primera, segunda y tercera, y el concejal César Pión en representación de la mesa directiva, dieron su balance del primer semestre.
Clemente Polo Díaz, secretario general del Concejo, presentó el balance de lo realizado por la corporación, en un año en el que el quorum de la plenaria ha cambiado en nueve oportunidades. Polo explicó que actualmente el quorum es de 18 concejales, y para tomar una decisión (quorum decisiorio) el número de concejales es de 10.
En su informe, Polo dijo que se han realizado 100 sesiones en el Concejo, 96 de ellas en los periodos ordinarios, dos de ellas en comisiones conjuntas y dos más en periodos de prórroga.
“La corporación ha estudiado 28 proyectos de acuerdo, doce de los cuales han sido de iniciativa del gobierno distrital; y 16 han sido presentados por las bancadas del Concejo. La bancada que más proyectos ha presentado es la bancada de La U”, dijo Polo.
Cuatro de los 28 proyectos han sido aprobados, entre esos el que permitió incorporar al presupuesto recursos por 310 mil millones de pesos; y el crédito con la banca por más de $95 mil millones para vivienda, ambas iniciativas presentadas por la administración.
Otro proyecto aprobado fue el que designó al estadio de béisbol con el nombre de Abel Leal, y uno que crea un nuevo logo para el Concejo.
Cuatro proyectos más fueron objetados, como el del Día sin Carro y el proyecto que buscaba limpiar los postes del cableado inútil o inservible.
El secretario destacó que se realizaron tres sesiones especiales fuera del recinto. Una de ellas en el barrio Martínez Martelo, para abordar el tema del traslado de Bazurto y la contaminación de la ciénaga de Las Quintas; otra sesión descentralizada se hizo en la vía Perimetral, para abordar aspectos sobre la situación ambiental y social de la ciénaga de la Virgen; y una tercera sesión sobre el impacto social de las obras de protección costera en los vendedores y operadores informales de las playas.
El concejal Pión se refirió a las iniciativas de su bancada, cuyo autor ha sido él mismo, como el Día sin Carro, el proyecto de inclusión de género de las mujeres cabeza de hogar, que redunde en beneficios tributarios; la política de economía naranja para la ciudad, la reglamentación de bebidas azucaradas en colegios y la amnistía para remisos del Ejército para que no paguen la libreta militar. Algunos de estos proyectos están en estudio, pero ninguno ha sido aprobado.
Tras la sesión de la rendición de cuentas, el Concejo conmemoró el Día del Comunero y otorgó la orden al mérito cívico a José Acevedo Gómez y a varios líderes comunales y cívicos como Nubis Casallas Jiménez, Sergio Liñán, Víctor Orozco, Santiago Alvear, Enrique Cervantes, Shirley Soto, Yolanda Moreno, Juana Matute, Milton Villadiego y Álvaro Sossa.
Bernardo Romero Parra, expositor y conocedor de la historia de los comunales expresó que: “Nosotros comenzamos el proceso de participación cívica en Cartagena en un momento en que la administración pública tenía una debilidad tremenda. En 1996 la administración no respondía a los problemas de la población; la administración no tenía dependencias descentralizadas”. Romero recordó cómo fue el proceso en el cual Cartagena fue pionera en muchos procesos de empoderamiento del liderazgo cívico y comunal.
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