Más de 300 jóvenes, quienes hacían parte de pandillas en el municipio de Marialabaja, han sido intervenidos por la Alcaldía de esa localidad de los Montes de María.
De ese modo lo dio a conocer la alcaldesa de esa municipalidad, Raquel Sierra Cassiani, quien aseguró que viene trabajando desde febrero del presente año con un grupo de profesionales de diferentes áreas.
Según la mandataria, estos jóvenes, quienes venían acumulando un prontuario delictivo, “ahora se están convirtiendo en microempresarios, tiempo después de haber abandonado las armas. En esta oportunidad, el turno fue para los jóvenes identificados con el nombre ‘Soldados de paz’, porque la paz es lo que han venido promoviendo, tras haber dejado el bajo mundo”.
Carmen Salgado Cañate, pedagoga del proyecto, afirmó que “se trata de una estrategia que sirve de muestra para la administración y para la comunidad en general. Debemos creer que los seres humanos merecemos nuevas oportunidades para cambiar y ser transformados a un nuevo estilo de vida”.
Jeison del Río Ramos, uno de los jóvenes beneficiados, dijo que “gracias a la Alcaldía, hemos dejado las armas por las Biblias y queremos vivir en paz”.
Aunque en el proyecto hay alrededor de 300 jóvenes focalizados que también han mostrado su interés por dejar la delincuencia, para acogerse a los beneficios de transformación que les ofrece la administración, no pudieron asistir, debido a la cuarentena, pero se anunció que en los próximos días y de manera sectorizada, otros grupos se despedirán de las armas.
Por su parte, algunos comerciantes, quienes habían sido víctimas de los jóvenes, contaron que “estos pelaos han tenido un cambio notable. Antes nadie llegaba al mercado por temor a ellos, pero hoy son ellos mismos quienes nos cuidan e invitan a la gente a venir. Ahora venden aguacate, bananos y mangos”.
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