Del barrio Alto Bosque de Turbana, la señora Ana Susana Gómez de Polo llegó a la plaza principal del barrio para escuchar, lo que por años ha estado esperando y que cree que esta vez se convertirá en realidad: que su municipio tenga agua potable las 24 horas.
Tiene 68 años y desde que nació, asegura, ha venido escuchando “el mismo cuento siempre. Pero hoy creo que será una realidad”. Ayer, en un evento público, la Gobernación de Bolívar y la Alcaldía de Turbana, anunciaron el inicio de la construcción del acueducto municipal, a través de Aguas de Bolívar, con una inversión de 17 mil millones de pesos.
“Toda la vida padeciendo por un poquito de agua. Ahora mismo estamos comprando cada tanque de esos que le llaman de 12 latas, a 5 mil pesos. Usted se imagina lo que representa comprar cada tres días un tanque de esos para nosotros que somos de escasos recursos. Eso sin meter el día que nos toca lavar, que hay que gastar mucho más”, explicó la señora.
Por su parte Yuri Montalvo, quien reside en la calle Nueva de La Cruz, sostuvo que en su caso, debe estar yendo en su burro al arroyo Mameyal para poder abastecerse de agua y así poder solventar las necesidades de su hogar. “En nuestro sector la situación está pésima ahora mismo, pues desde hace nueve meses no sabemos lo que es recibir agua del actual acueducto. Antes llegaba cada dos o tres meses, pero ahora toca esperar que vengan los carrotanques y tener que invertir hasta 15 mil pesos, eso no se justifica”, precisó.
Ambas mujeres, que escucharon atentamente por más de una hora los discursos del gobernador Dumek Turbay y del alcalde Senén Cantillo, manifestaron creer en que esta vez sí será realidad y que en 2019, después de más de 140 años, Turbana sí tendrá agua las 24 horas del días.
Ayer, el ambiente que se respiraba en Turbana, durante la firma del acta de inicio con el que se pone en marcha la construcción del acueducto que beneficiará a más de 15 mil personas, era de completo optimismo. Según explicó el gobernador Turbay, la firma contratista tiene un año para entregar esta obra, la cual aspira a inaugurar antes de dejar su mandato el próximo año.
“Estoy feliz porque esta obra ya no es un proyecto, es toda una realidad, estaré respirándole en la nuca al contratista para que entregue el acueducto en el tiempo establecido. No acepto excusas”, dijo Turbay.
El alcalde Senén Cantillo recordó que ninguna administración se preocupó por resolver los líos jurídicos que tenían los lotes en donde se encuentra la planta actual, que es donde se construirá la moderna. “La intención era que construyéramos el acueducto hace mucho rato, pues la Gobernación desde hace mucho tiempo tenía los recursos asignados, sin embargo fue complicado resolver el asunto del terreno porque era de una familia numerosa y en años anteriores nadie se propuso resolver con ellos la situación. Nosotros le pusimos el empeño y entendieron que el beneficio era para ellos y todos nuestros paisanos. Esta será una obra de gran bendición”, indicó el alcalde de Turbana.
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