Las lluvias acompañadas por fuertes vientos registradas el pasado domingo en los municipios de la Línea, así como en el norte de Cartagena, ocasionaron la caída de árboles y postes de energía, entre otras afectaciones en las diferentes localidades.
Entre los lugares afectadas están los cascos urbanos y rurales de San Estanislao de Kostka-Arenal, Soplaviento, San Cristóbal y corregimientos de Turbaco.
Los habitantes de la cabecera municipal de San Estanislao, especialmente los de los barrios El Carmen, Rincón Guapo, Villa Valentina y Barranquillita, sufrieron los embates del fuerte vendaval que destechó casas, tumbó árboles, postes y redes eléctricas.
Ayer funcionarios de la alcaldía Municipal, encabezados por la alcaldesa Yanet Vega y la secretaria de Planeación, evaluaron los daños e hicieron el correspondiente censo de damnificados.
Al cierre de esta edición, según lo reportado por la mandataria a la Unidad Nacional de Riesgos, a la Gobernación de Bolívar y a la Unidad Departamental de Riesgos, se hablaba de 635 viviendas que presentaron algún tipo de afectación. El reporte se hacía para requerir ayuda humanitaria y reparar los daños materiales sufridos.
Con el censo, se determinará el grado y número de daños sufridos por la población.
Por ello, la Alcaldía Municipal citó a todas aquellas familias que resultaron damnificadas con daños materiales en sus residencias, para que se acerquen a las oficinas de la administración y se registren en el censo de damnificados, que se realizará hasta las 4:00 de la tarde de hoy.
Luego de un consejo de Gestión de Riesgo con funcionarios de la Alcaldía, se declaró calamidad pública en el municipio.
Una de las viviendas más dañadas sufrió la caída de un árbol de mamón que estaba plantado en el patio del inmueble y que se dobló debido a los fuertes vientos. El pesado árbol se desplomó sobre el techo de la casa provocando que las láminas de zinc se partieran.
El estruendo fue tan grande, que los miembros de la familia corrieron hacia la calle buscando algún refugio en medio de la horrible tormenta.
Las ramas, según se conoció, cayeron en el patio, la cocina y parte de la sala, por lo que la noche del domingo, los habitantes del lugar tuvieron que dormir en casa de vecinos.
“Gracias a Dios no hay heridos, pero sí fueron varios los daños materiales. Ese vendaval estuvo muy fuerte”, indicó uno de los residentes del lugar.
La caída de árboles y postes de energía provocó que varias redes eléctricas se fueran al suelo y por lo mismo los municipios antes mencionados quedaron sin energía.
Electricaribe señaló que se esperaba que al finalizar el lunes se restableciera el servicio, pues concentró toda su fuerza operativa y equipo técnico en la atención de estos daños y la ejecución de podas para retirar las ramas que cayeron sobre la red eléctrica.
Las afectaciones podrán ser reportadas por los usuarios a la línea 115 desde cualquier operador o a través de la App Electricaribe.
Para el caso de Soplaviento, dividido de San Estanislao por el canal del Dique, el alcalde, Willintong Romero, sostuvo que “no hemos terminado de reponernos del vendaval de hace 20 días, en el que según el censo del comité de Riesgo y Defensa Civil, fueron atendidas 120 viviendas, y ahora el municipio sufre este nuevo vendaval donde se han reportado más de 50 familias afectadas”.
Respecto al municipio de San Cristóbal, no se obtuvo reporte de las familias que sufrieron afectaciones en sus viviendas.
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