El laboratorio del Instituto de Investigaciones Biológicas del Trópico de la Universidad de Córdoba empezará a analizar las pruebas de COVID-19 desde este miércoles 8 de abril, hecho que permitirá agilizar los diagnósticos y tomar las medidas de control de manera más rápida.
Así lo indicó el gobernador de Córdoba, Orlando Benítez, aduciendo que fue necesario cumplir con todos los requisitos establecidos en las normas y tras verificarse los distintos procesos, equipos y reactivos.
El mandatario, quien visitó el laboratorio, ubicado en Berástegui, zona rural de Ciénaga de Oro, en compañía del rector del alma máter, Jairo Torres Oviedo, y del secretario de desarrollo de la Salud, Walter Gómez, dijo que eso se constituye en un avance significativo que permitirá conocer más rápidamente los resultados de las muestras y actuar en consecuencia.
“Esto ha sido un esfuerzo contrarreloj, que se ha posibilitado gracias al trabajo de la Universidad de Córdoba, a su capacidad instalada que ya existía, porque esto en 15 días o un mes no se logra y en eso debemos reiterar el esfuerzo que desde la universidad se ha venido realizando”, señaló el jefe del gobierno departamental.
El mandatario subrayó que desde la gobernación no se han escatimado esfuerzos ni humanos, ni físicos, ni financieros para hacer posible que este hecho pueda darse. “Eso es una gran noticia porque nos va a permitir tener una descentralización en cuanto a la realización de las pruebas, respuestas más rápidas, lo que para nosotros se convierte en una luz de esperanza, en medio de esta pandemia que nadie esperaba”, puntualizó.
Agradeció el esfuerzo de los profesionales, de los investigadores y de los estudiantes que han colocado su mayor esfuerzo para lograr este objetivo, lo que permitirá obtener resultados de muestras de COVID 19 en 5 horas.
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