Un nuevo capítulo se vive en el Hotel El Prado de Barranquilla luego de la demanda interpuesta por el Consorcio FTP en contra de la antigua administración por el detrimento patrimonial de cerca de 10 mil millones de pesos.
El Consorcio FTP, que actualmente tiene a su cargo la administración del hotel, en rueda de prensa con los medios de comunicación dio a conocer que encontró irregularidades que ameritan una demanda ante las autoridades, por los delitos endilgados por la apoderada jurídica, Bianith Bohórquez Pinto, de “estafa agravada, falsedad en documento privado, fraude procesal, entre otros”.
“Dentro de todo este detrimento patrimonial que ha sufrido quien hizo la inversión alcanzaría la suma de los 10 mil millones de pesos, como pérdidas a causa de esta defraudación y del abuso de confianza claro y expreso en cada una de las denuncias”, explicó Bohórquez Pinto.
Agregó que estas denuncias fueron elevadas ante las Fiscalías 58, 45 y 46 de la Unidad de Patrimonio y lo que se requiere puntualmente es el accionar inmediato de este ente de control para que se adelanten las investigaciones de rigor contra Jaime Espinosa Rosado.
“Las denuncias fueron interpuestas posterior al conocimiento de las distintas auditorías. Lo que hay que tener claro es que uno no espera que sea directamente el representante legal quien empiece hacer mal uso o una administración irregular, lo cual condujo a que se hicieron múltiples investigaciones y auditorías que arrojaron estos resultados que fueron los que terminaron en las denuncias presentadas en los años 2019 y 2020 y la última que se interpuso fue la del año pasado”, dijo la abogada.
Sostuvo que junto con Espinosa Rosado, se denunció al director técnico de obras, Carlos Cabal Hidalgo.
“Carlos Cabal Hidalgo, asumió la dirección de la ejecución de cada uno de los contratos y subcontrató a cada una de las empresas y cuyos nombres aparecen en las denuncias que fueron interpuesta ante la Fiscalía por parte del Consorcio FTP”, puntualizó Bianith Bohórquez.
Indicó que en este caso no solo estaban inmersos Espinosa Rosado y Carlos Cabal, también las demandas cobijan a Camilo Andrés Muñoz Bernal, Martha Vergara Castro, Cecil Alfonso González Díaz, Carlos Rodolfo Carrasquilla García, Jair Jairo Fernández Escárraga, Clara Escobar González y Orlando Parra Mercado, por los delitos de concierto para delinquir, falsedad ideológica en documento privado, abuso en condición de inferioridad, fraude procesal y hurto agravado por la confianza.
Manifestó que las irregularidades van por múltiples hechos entre los que se cuentan el pago de facturas duplicadas por trabajos eléctricos que nunca fueron realizados, o la ejecución de contratos para reforzar la red de contra incendios. “Al momento de hacer la respectiva inspección de rigor a dicha red se encontró en la torre ejecutiva varios errores constructivos, los cuales de forma clara colocaron en riesgo la vida de las personas que hicieron uso de la edificación, la cual debido a su actividad comercial aglomera a un gran número de personas”.
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“La instalación de una bomba de usos generales, la cual originariamente es de color verde y para hacerla parecer una bomba certificada para un sistema de extinción de incendios, fue pintada artesanalmente de color rojo, el cual con el pasar de los años fue desapareciendo dejando en evidencia el engaño, fraude e irresponsabilidad, por el grado de peligro al que fueron expuestos todo el personal humano y la edificación histórica y patrimonio cultural como lo es el Hotel El Prado”, expuso la asesora legal.
Terminó diciendo que por todo este tipo de hechos fue lo que permitió que se interpusieran las denuncias, “denuncias, que ahora esperan que las autoridades investiguen a fondo para hacer que los culpables de los punibles paguen por estos hechos”.
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