Fuertes disturbios se registran en la vía que de Montería conduce al municipio de Cereté, a la altura del corregimiento El Retiro de los Indios, donde un grupo de personas protesta para exigir la ubicación de unos reductores de velocidad en el sitio donde un vehículo causó la muerte a Cluadia Guerra Sánchez y a sus dos hijas, Esther y Valeria, de dos y seis años de edad.
Miembros de la Policía se enfrentaron a la comunidad con el fin de despejar la vía que se mantiene bloqueada desde hace ocho horas, dejando incomunicada a Montería con el resto de la Costa Atlántica y en el hecho cinco personas resultaron heridas.
La fila de buses y de vehículos particulares es interminable. Ni la mediación del alcalde de Cereté, Elber Chagui, quien llegó a la zona a hablar con los manifestantes, logró que se levantara el bloqueo, pese a que algunos se comprometieron a hacerlo cuando instalaran unos reductores poir lo menos provisionales.
El mandatario de la localidad dijo que la comunidad está en todo su derecho a exigir los reductores y se comprometió a hacer la gestión con la concesión Autopistas de la Sabana, pues se trata de una vía nacional que no puede ser intervenida por el municipio.
A su turno, el comandante de la Policía Metropolitana, coronel Javier Alberto Morales, dijo que lamentaba profundamente la tragedia que había vivido la madre y las tres hijas, pero advirtió a la comunidad que no es prudente utilizar las vías de hecho para lograr su propósito.
También dijo que están adelantando un operativo con el fin de dar con el paradero del conductor del vehículo, quien huyó del lugar de los hechos luego de ocurrida la tragedia. Aunque la Policía no entregó la identidad de la persona que manejaba el carro, algunos miembros de la comunidad señalaron que se trataba de Sergio Rhenals, quien vive en el mismo corregimiento.
En medio de las protestas, la quema de llantas, los disparos y la angustia de la familia afectada, los vecinos y familiares se preparan para dar cristiana sepultura a Claudia y a sus dos hijas, quienes fueron arrolladas por el vehículo Aveo de placas DAC 928, cuando trataban de cruzar la troncal, luego de asistir a un culto cristiano en la iglesia Filadelfia.
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