La Fiscalía 80 Especializada del Grupo de Exhumaciones de la ciudad de Cartagena, adscrita a la Dirección de Justicia Transicional, realizó ayer en Sincelejo, la diligencia judicial en la que entregó los restos óseos de tres víctimas de desaparición forzada y homicidio, a sus familiares.
David Dager Cruz, fiscal 80 Especializado, presidió la ceremonia en la que entregaron los restos de las víctimas Adalberto Manuel Corrales Pérez, Carlos Enrique Padilla Barón y Rodolfo Antonio Bohórquez Manjarrez.
Una de las víctimas es oriunda de Sincelejo, otra del corregimiento de Caracolí, jurisdicción del Carmen de Bolívar y la tercera del Playón, en el municipio de Marialabaja, departamento de Bolívar.
“Estas son víctimas de la violencia desaparecidas entre el año 2000 y 2005, fueron exhumados los cuerpos y enviados al laboratorio para el proceso de identificación y afortunadamente hoy hacemos entrega digna a sus familiares después de tanto tiempo”, indicó el fiscal Dager Cruz.
Explicó que en el presente año han entregado los restos de 22 víctimas en el departamento de Sucre, correspondientes a delitos de homicidio, desaparición forzosa , “de estos tenemos varios de las víctimas del Palmar, San Onofre, que fueron hallados los cuerpos allí, los logramos identificar y se entregaron a sus familiares en meses pasados”, aseveró.
El Fiscal 80 Especializado informó que continúan las exhumaciones y en la medida que llegan las identificaciones son entregados en este tipo de ceremonias a sus familiares. Esperan antes de finalizar el presente año entregar los restos de otras víctimas.
Previo a la entrega de los restos se cumplió con un acto religioso en el que estuvieron presentes un sacerdote y un pastor evangélico, quienes oraron por el eterno descaso de estas víctimas y que sus familias se fortalezcan en la paz que brinda Dios.
María Bohórquez Manjarrez, hermana de Rodolfo Bohórquez, recibió los restos de este, quien fue desaparecido del parque Santander de Sincelejo, el 23 de febrero de 2007, y hace parte del caso de falsos positivos cometidos en esta región.
“Nosotros vivíamos en el barrio Normandía y él mantenía en el parque Santander y era una persona que tenía una condición especial, tenía 26 años y era como un niño. Cuando desapareció comenzamos a buscarlo por todas partes”, dijo María Bohórquez.
Agregó que ellos ya tienen claro lo que pasó con su hermano, porque la persona responsable del hecho entregó versión libre sobre este caso.
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