La Procuraduría Ambiental solicitó que en forma inmediata se succione el agua putrefacta que sale del relleno sanitario de Montería y que está causando graves daños en la zona.
Así lo indicó el alcalde de la ciudad, Carlos Ordosgoitia, quien este domingo se reunió con la comunidad de Loma Grande, sitio donde está ubicado el relleno sanitario.
El mandatario aseguró que “estamos avanzando mucho, vamos a llegar a un punto óptimo que debemos construir entre la administración, la comunidad y las demás partes. Lo importante es que ya están en marcha acciones contundentes por parte de las autoridades ambientales”.
En primera medida, se le indicó a los habitantes de la zona que la Procuraduría Ambiental solicitó la construcción de un plan de acción, que se empezó a desarrollar el pasado jueves 25 de agosto y se remitió el viernes 26 de agosto a la Procuraduría.
El equipo de trabajo de la Alcaldía, junto con el de Urbaser, analizaron costos, transporte, tiempos, condiciones climáticas, lluvias, ph, conductividad, entre otros, para poder estructurar el plan de acción que se envió con el ánimo de tener una solución integral y definitiva.
Dicho plan contempla, como medida de mitigación, la succión de las aguas represadas. Acción que el día de ayer (sábado 27 de agosto) se inició con un vehículo de la empresa Veolia.
Durante los próximos días se estima que a la zona sigan llegando vehículos para seguir succionado el agua de donde está represada, toda vez que se le informó a la comunidad que se esperan liberar 6 mil metros cúbicos.
La anterior acción, está ligada al trámite que debe adelantar Urbaser ante la CVS para el permiso de vertimiento y el funcionamiento de una nueva planta de tratamiento de aguas residuales.
Con relación a la construcción de un terraplén para evitar que el agua se rebose y baje hasta la vía de acceso, se explicó que es necesario hacer un estudio de topografía para evitar que se inunden predios aledaños.
Además, la empresa Urbaser debe adelantar las actuaciones correspondientes para los permisos de servidumbres y revisar las vías históricas de desagüe de las aguas pluviales.
El alcalde indicó que estas medidas van a tener un seguimiento constante y contarán con la trazabilidad y soportes necesarios con el fin de garantizar que se estén teniendo los resultados esperados. “En estos días que estamos trabajando con la autoridad ambiental y la Procuraduría tendremos una línea de tiempo clara y definida de cómo va a ser la solución definitiva para que se acabe la pesadilla que vienen soportando los habitantes de Loma Grande”.
Reiteró que las mesas técnicas se siguen adelantando y en ellas está abierto el espacio para la participación de los equipos que la comunidad designe.
Finalmente, dijo que desde la administración se deben seguir buscando soluciones conjuntas y concertadas para presentarlas en la Audiencia Pública Ambiental que se adelantará el 26 de septiembre.
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