Es una enfermedad huérfana provocada por el aumento de producción de una hormona llamada cortisol y producida por las glándulas suprarrenales.
Este síndrome es muy raro, sin embargo, su diagnóstico es muy sencillo, pues se puede detectar por medio de un examen de laboratorio.
Es importante saber que si los niveles de cortisol disminuyen, varios de los síntomas podrían desvanecerse; sin embargo, los pacientes que han sido diagnosticados como recuperados tienen mayor riesgo de presentar enfermedades cardiovasculares, motivo por el que deben permanecer cuidándose, siguiendo una dieta saludable y realizando actividad física regularmente. (Lea aquí: 7 consejos para bajar de peso y combatir la obesidad)
Existen 3 tipos de tratamiento para manejar esta enfermedad.
1. Tratamiento oral. Es considerado como el más leve de las 3 formas de tratar esta enfermedad, pues sirve para disminuir los niveles de cortisol, pero no se utiliza como un tratamiento curativo.
2. Procedimiento quirúrgico. La operación se realiza para extraer un tumor que causa la enfermedad, se realiza por vías diferentes dependiendo de la ubicación de este.
3. Radioterapia. Este tratamiento se utiliza cuando la cirugía no logra normalizar la producción de cortisol. Se irradia la hipófisis y con el paso del tiempo se regula. Se recomienda que mientras se espera el efecto del procedimiento, se realice tratamiento médico para controlar la enfermedad.
¿Cuándo debo consultar al médico?
Comunícate con el médico si tienes síntomas que sugieren la presencia del síndrome de Cushing, especialmente si estás tomando corticosteroides para tratar una afección como el asma, la artritis o la enfermedad intestinal inflamatoria.
Debes saber...
1. Los pacientes que tienen este síndrome pueden presentar obesidad de distribución central, hipertensión arterial, problemas con el colesterol y diabetes tipo mellitus, todo esto asociado a un mayor riesgo cardiovascular.
2. Este síndrome puede ser consecuencia de haber tomado demasiados corticosteroides por vía oral.
3. Uno de los síntomas más notorios una joroba de grasa entre los hombros, la cara redondeada y estrías de color rosado o púrpura en la piel. La cara toma una apariencia denominada “luna llena” y entre los hombros se forma una protuberancia llamada “cuello bisonte”. Estos pacientes suelen tener la piel fina y frágil, propensa a hematomas, a cicatrizar de forma lenta de heridas, picaduras de insectos e infecciones, además, sufren acné. (Le puede interesar: Una guía para tratar la obesidad en Colombia)
4. En el caso de las mujeres suele aparecer vello facial y el período menstrual se vuelve irregular.
5. En los hombres, uno de los síntomas comunes es la disminución del deseo sexual y de la fertilidad, además: disfunción eréctil.
6. Es importante saber que las mujeres son más propensas a desarrollar esta enfermedad, con una frecuencia de 3 a 8 veces mayor que en los hombres.
7. La edad más común en la que se desarrolla este síndrome es entre los 20 y los 50 años.
Más síntomas
Otros signos y síntomas de este síndrome son: fatiga intensa, debilidad muscular, depresión, ansiedad e irritabilidad, pérdida del control emocional, dificultades cognitivas, presión arterial alta nueva o que empeora, dolor de cabeza, infecciones, oscurecimiento de la piel, pérdida ósea, que produce fracturas con el tiempo y en niños, retraso en el crecimiento.
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