Socialmente, el cáncer siempre ha sido una enfermedad muy temida. La asociamos con muerte, pero hoy en día no es una realidad porque la mayor parte de los pacientes se curan.
La adherencia a los tratamientos es más alta, pero empieza a aparecer la fatiga oncológica, los pacientes viven con la enfermedad y la enfermedad a veces no se cura, pero si sigues con el tratamiento puedes lograr muy buenos resultados.
A veces hacemos lo que se llama ´vacaciones terapéuticas´, pequeños descansos porque los tratamientos en algunas ocasiones generan toxicidad que puede cansar, pero la adherencia en conjunto es buena.
¿La covid cómo ha afectado al cáncer?
Ha retrasado los diagnósticos y algunos tratamientos, sobre todo cirugías, que se han demorado por la necesidad posterior de ingresar en ucis, que estaban colapsadas.
Pero creo que en conjunto en España hemos sabido manejarlo derivando a los pacientes a centros de excelencia o a otras comunidades con menos afectación en ese momento. Lea aquí: Donar cabello, otra forma de ayudar a los pacientes con cáncer
¿Cuál es la importancia de la adherencia en el tratamiento del cáncer?
La adherencia al tratamiento del cáncer es muy importante, es uno de los grandes retos a nivel asistencial.
En primer lugar porque influye en la eficacia de los tratamientos, es decir, lo que esperamos conseguir de los tratamientos, pero también en la seguridad, cualquier aparición de complicaciones, interacciones, efectos secundarios. Es muy importante trabajar en este sentido.
En el ámbito del cáncer hay que tener en cuenta que cada vez, afortunadamente, las enfermedades se van cronificando, y son poblaciones que normalmente tienen edades avanzadas y por tanto puede haber presencia de otras terapias, además del cáncer.
Por tanto, es importante poner la mirada y ofrecer apoyo y acompañamiento muy estrecho a las personas con cáncer para favorecer la adherencia terapéutica. Le puede interesar: Cuidadores, la prueba de que el amor existe
¿Qué importancia tienen la alimentación y el ejercicio?
El autocuidado y los hábitos de vida saludable son conceptos que están dentro de la adherencia. La situación emocional de una persona influye en el grado de adherencia, por eso es tan importante ofrecer recursos de salud mental a los pacientes.
El ejercicio físico y la alimentación han mostrado evidencia en algunos tipos de cáncer de que mejora el pronóstico y la calidad de vida.
Lo idóneo es prescribir ejercicio físico pautado por los especialistas y hacer un acompañamiento nutricional desde el diagnóstico, pero lamentablemente queda mucho para conseguir la asistencia multidisciplinar que necesitan las personas con cáncer.
En el tratamiento y abordaje del cáncer, la adherencia terapéutica es básica, pero una buena alimentación y la práctica del ejercicio físico, también.
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