La pandemia ocasionada por el coronavirus, puso en alerta los sistemas de salud del mundo. La rápida propagación de la enfermedad y los síntomas que causa derivó en la declaratoria de pandemia por parte de la Organización Mundial de la Salud (OMS). El virus, cuyo brote se dio en la ciudad china de Wuhan, rápidamente se expandió y se convirtió en el mayor reto de salud pública en lo corrido del siglo XXI.
Sin embargo, las cuarentenas y todas las medidas sanitarias como el constante lavado de manos, distancia social y limpieza constante de elementos de contacto, no solo permitieron frenar la expansión del coronavirus, sino también contener otro tipo de enfermedades de tipo respiratorio especialmente, lo cual previno picos de este tipo de malestares.
De acuerdo con la Fundación Neumológica Colombiana, la Infección Respiratoria Aguda (IRA), afecta a grupos especialmente vulnerables; los pacientes pediátricos y los adultos mayores. De acuerdo con el Instituto Nacional de Salud (INS), en 2019 se notificaron 5.196.943 consultas externas y casos urgencias en Colombia por IRA y se presentaron 16.524 hospitalizaciones.
Según el doctor Juan de Dios Villegas, decano de la Facultad de Medicina de la Fundación Universitaria San Martín, algunas de las enfermedades que se pudieron prevenir gracias al bajo contacto entre personas y la barrera del tapabocas y las medidas de bioseguridad fueron todas las respiratorias virales, bacterianas y micóticas, neumonías, bronconeumonías, bronquitis, infecciones del tracto respiratorio superior, tuberculosis, entre otras.
“Este tipo de enfermedades por lo general empiezan con síntomas de un resfriado común y posteriormente derivan en sintomatologías que ponen el riesgo la vida del paciente. Por eso es clave el monitoreo a enfermedades como la influenza o el virus AH1N1, que pueden llegar a ser mortales si no se tratan de manera correcta”, señaló el doctor Villegas.
Cabe señalar, que las medidas sanitarias que se tomaron por el coronavirus, son las que usualmente se le recomiendan a pacientes que tienen afecciones respiratorias. Esto incluye el uso constante del tapaboca, bañado de manos y estar en casa mientras se da el proceso de recuperación.
Panorama 2020
De acuerdo con la Secretaría de Salud de Bogotá, el principal pico por infección respiratoria aguda se daba en el mes de marzo y parte de abril. Cabe señalar, que dicho nivel en este año no se dio, debido a todas las medidas implementadas por la llegada de la pandemia en Colombia.
Esto, derivó en una baja de la tasa de mortalidad en la población más vulnerable a padecer IRA, los menores de cinco años y los adultos mayores. De acuerdo con esa entidad, entre enero y mayo del presente año, se registraron cuatro fallecimientos de menores de edad por neumonía.
· A octubre de 2019 en Cali se habían reportado 2.495 casos de IRA.
· Un estadio de la Contraloría de Medellín señala que cerca de 4.500 pueden morir al año por enfermedades respiratorias asociadas a la contaminación.
· La tasa ajustada de mortalidad por IRA para el 2019 disminuyó principalmente en Tolima, Cauca, Cundinamarca, Huila, Sucre, Santander, Atlántico. Putumayo, Córdoba, Boyacá y Nariño, de acuerdo con el Instituto Nacional de Salud.
· Entre enero y mayo de 2020, la mortalidad por IRA en Bogotá cayó en un 80%, en comparación con el mismo periodo del año pasado.
Preparación para el futuro
A pesar del escenario complejo que desató el coronavirus, las medidas para fortalecer el sistema de salud, permite que Colombia esté mejor preparado para afrontar en un futuro los picos de afecciones respiratorias.
“Mejoró la disponibilidad de camas de cuidado intensivo para paciente crítico, mejoró la acción oportuna de los equipos de epidemiología, la atención primaria, vigilancia epidemiológica y la aplicación de protocolos de manejo, según la patología que presenten”, destacó el decano.
Por ahora, es clave continuar con todas las medidas de seguridad y contener a través del autocuidado la expansión del virus.
Recomendaciones generales para prevenir la IRA
· Vacunar contra la influenza a menores de seis años, madres gestantes y adultos mayores de 60 años.
· Proteger a los menores de seis años con todo el esquema de vacunación.
· Garantizar a los recién nacidos alimentación exclusiva con leche materna hasta por los menos sus seis primeros meses de vida.
· Evitar los cambios bruscos de temperatura y cubrir boca y nariz cuando se salga de lugares cerrados.
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