Expertos presenta nuevos tratamientos para el cáncer

Expertos estadounidenses en cáncer se reúnen desde el pasado fin de semana en Orlando (Florida) para discutir nuevos avances en la búsqueda de tratamientos cada vez más personalizados contra la enfermedad, incluso a nivel molecular. “Tenemos un tema en la reunión de este año: tratamiento del cáncer personalizado, desde el uso de análisis molecular a la selección de los tratamientos más apropiados para pacientes”, dijo Richard Schilsky, presidente de la Sociedad Estadounidense de Oncología Clínica (ASCO, por su sigla en inglés), que organiza la reunión anual. Resultados de docenas de estudios clínicos han sido divulgados en la reunión que comenzó el viernes con la participación de unas 30.000 personas. En el mundo, cerca de 13% de las muertes se deben al cáncer. “Pienso que está claro para todos nosotros, los que tratamos a pacientes con cáncer, que la oncología ya no es parcial, que todo es medicina” por igual, dijo Schilsky, señalando los grandes avances que se han hecho en la selección de mejores tratamientos para pacientes individuales. “Somos cada vez más capaces de confeccionar tratamientos individuales”, como para la biología particular de un tumor, “haciendo coincidir el tratamiento correcto con el paciente correcto en el tiempo correcto, para que los pacientes eviten costos innecesarios y efectos secundarios de una terapia que no los ayudará”, dijo Schilsky, señalando que éste es el futuro de la oncología. ESTUDIOS PRESENTADOS ASCO aceptó en su reunión anual 4.000 trabajos de investigación sobre gran variedad de tópicos en oncología, dijo Eric Winer, profesor de la universidad de Harvard asociado al grupo. El cáncer causó la muerte a 7,4 millones de personas en 2004, según la Organización Mundial de la Salud (OMS). Los más mortíferos son el de pulmón, estómago, colon, hígado y mamas. Cerca de 30% de las muertes por cáncer podían haberse evitado, informa la OMS, que señala el hábito de fumar como el que representa un mayor riesgo de vida. El cáncer comienza con la modificación de una sola célula y pueda ser causado por factores externos, genéticos o hereditarios, o una combinación de ellos. LINFÁTICOS Y DE PIEL Vacunas terapéuticas contra los cánceres linfáticos y de piel arrojaron resultados esperanzadores, el más convincente de estos estudios se refiere a pacientes tratados por un linfoma folicular no-Hodgkin, una forma agresiva de cáncer linfático, que se aplicó durante ocho años a 177 pacientes. De este grupo, los pacientes que fueron tratados con la vacuna BiovaxID, de la firma estadounidense Biovest International no mostraron más rastros de la enfermedad durante unos 44 meses, contra 30 meses del grupo testigo, lo que representa un avance del 47%. CÁNCER DE MAMA Una nueva terapia que apunta a bloquear la capacidad reparativa de las células cancerosas resulta prometedora contra el cáncer de mama, especialmente para los más difíciles de tratar. El tratamiento neutraliza la enzima responsable de detectar rupturas en el ADN, con el fin de impedir la reparación de daños en las células. Al igual que las células sanas, las cancerosas recurren a la enzima PARP poli (ADP-ribosa) polimerasa para regenerarse cuando resultan dañadas, como cuando son sometidas a quimioterapias. Los estudios examinaron el comportamiento de los tumores tratados con quimioterapia al inhibir la enzima PARP. Durante seis meses, las participantes fueron tratadas con quimioterapia, pero a algunas también se les aplicó un inhibidor de la enzima PARP llamado BSI-201. Cerca de 62% de las pacientes tratadas con el inhibidor BSI-201 presentaron una mejoría clínica, contra 21% que lo hizo entre las sometidas solo a quimioterapia. CÁNCER DE PULMÓN La combinación de dos medicamentos oncológicos permitió, tras un tratamiento de quimioterapia, retrasar el progreso del cáncer de pulmón avanzado. Esta prueba clínica de Fase 3 conducida en 768 pacientes mostró que el cáncer en quienes fueron tratados con Tarceva (del laboratorio Roche) combinado con Avastin, progresó más lentamente que entre los pacientes del grupo de control tratados solamente con Avastin. Los pacientes tratados con una combinación de Tarceva y Avastin sobrevivieron un promedio de 4,8 meses más antes de que la enfermedad empeorara, comparativamente a los 3,7 meses del grupo testigo.