El viaje de Maríalabaja a Cartagena que hicieron los familiares de Lisandro José Zúñiga Valdez, en la mañana de ayer, estuvo cargado de dolor, misterio y mucha incertidumbre.
Cuando el reloj marcó las 10 de la mañana de ayer, Rosa Valdez estaba sentada en las afueras de la morgue de Medicina Legal, en el barrio Zaragocilla, junto a otros parientes.
Lucía una blusa blanca y un pantalón negro, con los que decidió guardarle luto a su sobrino, a quien asesinaron de una cuchillada en el cuello, en la noche del viernes, en el municipio de Maríalabaja.
Rosa no sabe aún cómo fue que Lisandro terminó de esa manera y no tiene idea de quién es el responsable, pero espera que la justicia divina y la Policía logren esclarecer los hechos.
Según ella, la tragedia ocurrió a las 8:50 de la noche, pero no sabe quién se encargó de llevarlo al hospital local de esa población, en donde les dieron la mala noticia poco después.
La Policía de Bolívar indicó que se investiga una supuesta riña y se trata de confirmar si el supuesto asesino es alias el May, con quien Lisandro habría sostenido la pelea en la que resultó herido.
Drogas. Este es el móvil que indagan los investigadores del caso, tras recolectar información en el sector El Recreo, de Maríalabaja, en donde Zúñiga fue acuchillado.
Al parecer, un lío por estupefacientes motivó la pelea entre el May y Lisandro.
Por su parte, sus dolientes manifestaron no saber qué hacía la víctima por esa zona. Según ellos, vivía en la vereda El Canal, en una finca. Así mismo, indicaron que no le conocían pleitos ni amenazas que les den indicios de las razones por las cuales lo asesinaron.
El hombre dejó huérfano un hijo de ocho meses y era campesino. A veces se ganaba la vida como cotero, según Rosa.
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