De guía espiritual a abusador sexual habría pasado el sacerdote Christian Mercado Mercado, quien es señalado de acceso carnal violento agravado contra una menor en Cartagena.
La Fiscalía aseguró que el hombre no aceptó los cargos, pero debido a la información recopilada en las investigaciones, un juez con funciones de Control de Garantías lo pudo enviar a la cárcel San Sebastián de Ternera.
“Guía espiritual”
La madre de la joven víctima, de 15 años, le contó a la Fiscalía que los hechos habrían ocurrido desde junio de 2020 hasta marzo de 2021.
Al parecer, todo inició cuando la mujer llevó a su hija a donde el cura para que le sirviera de guía espiritual debido al acoso escolar que estaba sufriendo en el colegio.
“Según lo establecido, el hombre se ganó la confianza de la señora. Así, en época de pandemia, le habría pedido la autorización a la mujer para que la niña lo acompañara a entregar mercados y a otras acciones en desarrollo de su misión religiosa”, dijo la Fiscalía.
Con las investigaciones se concluyó que en una de esas ocasiones, cuando se quedaron a solas en la casa cural, el sacerdote, al parecer, la abusó sexualmente.
Mercado Mercado habría intimidado a su víctima con la afirmación de que por ser voluntaria de la iglesia debía callar lo que sucedía. Con esa manipulación, presuntamente, abusó de ella no solo en la iglesia sino en otros espacios.
“La víctima fue violentada moral y psicológicamente”, dijo la fiscal del caso. La mujer asegura que el supuesto violador utilizaba su rol de poder y las creencias religiosas para acceder en varias oportunidades a la menor.
La Fiscalía aseguró que tiene indicios que el sacerdote tenga otras víctimas de abuso sexual, por lo que invita a denunciar este tipo de hechos para que no queden en la impunidad.
Se pronuncia
La Arquidiócesis de Cartagena, por su lado, manifestó a través de un comunicado oficial que desde que tuvo conocimiento de la denuncia (el 29 de abril de este año) procedió a aplicar el protocolo que tiene para estos casos.
En el informó que da a conocer expresa que “el Arzobispo de Cartagena, de acuerdo con las Normas Vigentes actualmente en la Iglesia, procedió a aplicar el protocolo como lo son: 1. Prohibición del ejercicio del ministerio presbiteral al sacerdote señalado. Medida que fue ejecutada inmediatamente. 2. Investigación Preliminar para verificar la verdad de los hechos denunciados. Esta medida está en ejecución desde el día 29 abril, por parte del Tribunal Eclesiástico de la Arquidiócesis”.
Como tercer punto señaló que “a la luz de los resultados de la investigación preliminar, iniciar el proceso canónico a que haya lugar, según las normas vigentes en la iglesia”.
Asimismo, envió un mensaje a la víctima y a su familia: “reiteramos nuestro compromiso de acompañamiento a las víctimas y a sus familias, y manifestamos nuestra disposición a colaborar con las autoridades. Invitamos también a denunciar y a poner en conocimiento de las autoridades
competentes sobre los comportamientos contrarios a las exigencias del Evangelio y de la iglesia en la protección de los menores, para establecer la verdad y garantizar justicia para todos”.
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