La justicia llegó, mucho más rápido de lo que la familia de Miguel Marrugo Castaño esperaba. Hay sentimientos encontrados porque ‘Migue’ ya no está, y nada devolverá a la vida a este joven, que se ganaba la vida trabajando en un carro repartidor de cervezas. Lea aquí: “Salvó a mi hermano”: hija de mujer que murió en accidente en Santa Rosa
El dolor sigue allí, pero a la vez hay cierta paz porque la Policía actuó, y tras recoger pruebas capturó al presunto responsable. Ahora esperan que la condena sea ejemplar y pague como debe ser.
Lo que las autoridades han revelado que el pasado 5 de marzo hubo un ataque sicarial en el que murió Marrugo Castaño, de 27 años, mientras realizaba en sus labores de repartidor de cervezas en una tienda del barrio La Esperanza, en Cartagena.
La información recolectada detalla que el atentado no iba contra el trabajador oriundo del corregimiento de Ballestas, jurisdicción de Turbana.
La captura
La Policía Metropolitana de Cartagena destacó que en menos de dos meses, en un trabajo articulado con la Fiscalía, Sijín e Interpol, y mediante la estrategia ‘Zonas Lázaro’, logró capturar al presunto sicario que acabó con la vida de Miguel Marrugo Castaño, y a quien identificó como Cristian Racero Jiménez.
El operativo de aprehensión fue en el barrio La Esperanza, donde cayó Racero Jiménez, a quien apodan ‘el Pocho’, de 24 años. Este presunto delincuente cuenta con varias anotaciones judiciales por porte ilegal de armas de fuego y violencia intrafamiliar; y cuenta una condena de más de tres años, la cual estaba pagando en su residencia, bajo la medida de detención domiciliaria.
Las labores investigativas y análisis de videos de cámaras de seguridad fueron suficientes para que se expidiera por un juzgado penal municipal con funciones de Control de Garantías la orden de captura en contra de ‘el Pocho’. Este crimen causó consternación entre cartageneros y bolivarenses.
El capturado fue puesto a disposición de la Fiscalía, donde será imputado ante un juez por los delitos de homicidio agravado en concurso homogéneo con homicidio agravado en grado de tentativa y en concurso heterogéneo con fabricación, tráfico o porte de armas de fuego o municiones.
Lo que ocurrió
Eran las 7:15 de la noche de ese sábado 5 de marzo cuando Miguel Marrugo y sus compañeros de trabajo seguían en su jornada laboral y entregaban un pedido a una tienda en La Esperanza. Lo que se dijo es que el sicario apareció e hizo disparos contra una persona que estaba en ese mismo lugar, pero fue el joven Ballesteros quien recibió dos balazos. Otro de su compañeros fue herido.
“Él estaba repartiendo las cervezas, iba en el camión con sus compañeros y entregaba una factura a un cliente cuando aparecieron los sicarios”, dijo uno de los familiares en esa oportunidad. La Policía no dio a conocer contra quién iba dirigido ese atentado.
Comentarios ()