En la calle Segunda del barrio El Prado, en Turbaco, vuelve a correr la sangre.
Los vecinos de este sector del municipio no se han alcanzado a reponer de la muerte de Nelson Montes Martínez a manos de su hermano Howard, cuando nuevamente la muerte los vuelve a rondar. Como se recordará, este suceso fue el pasado 2 de enero.
Este nuevo caso de homicidio también involucra a dos hermanos, vecinos de los Montes Martínez. Pero esta vez no fue una pelea entre familiares; es lo contrario, uno salió en defensa del otro y murió al recibir un impacto de bala a manos de dos sicarios. El otro quedó herido y se recupera en la clínica Madre Bernarda de Cartagena.
Lo que cuentan algunos es que eran las 7 de la noche de ayer sábado cuando dos sicarios en una moto dispararon varias veces contra Nealson Devoz Figueroa, de 41 años, quien estaba en el frente de su casa sobre un andén con varios amigos. Quedó tirado en el piso con un balazo en el pómulo derecho y uno de los que lo acompañaban, Jesús Manuel Montero Mercado, de 28 años, fue herido en un pie.
Todo parece indicar que Janels, de 48 años y hermano mayor de Nealson, al ver que le dispararon a su hermano, salió detrás de los pistoleros.
“Según lo que me dicen es que Janels no estaba en la casa, sino que estaba donde un vecino tomándose unas cervezas. Cuando él alcanza a ver lo que ocurrió, como que sale corriendo y se va contra los tipos y es allí cuando recibe un balazo”, contó Aníbal Devoz, hermano de las víctimas.
Aníbal, quien viven cerca, fue avisado de los sucedido y salió y de inmediato vio a su hermano menor tirado en el piso. “Me dijeron que era Nealson, y lo montaron en una moto. Enseguida me dijeron que mi otro hermano era el otro herido y también se lo llevaron de una, pero Janels ya iba muerto”, contó.
Janels deja dos hijos y se dedicaba a la ebanistería, mientras que su hermano herido trabaja la zapatería y tiene pocos meses de haber llegado de Barranquilla, a donde no pudo regresar como consecuencia de la cuarentena.
Lo que dice la Policía
Sobre este caso, según la Policía Metropolitana de Cartagena, no hay capturas por este homicidio. Sin embargo, una de las hipótesis que manejan es un posible ajuste de cuentas por un tema relacionado con drogas. Miembros de la Sijín de Turbaco llegaron al sitio e iniciaron las investigaciones para dar con los responsables.
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