Fue desde agosto del año pasado cuando se prendieron las alarmas en la zona insular de Cartagena: Tierrabomba y Barú. En esos sectores, caracterizados por la tranquilidad y la afluencia de turistas por la exuberancia del paisaje, empezaron a ocurrir robos, de manera esporádica.
Robos de embarcaciones auxiliares, asaltos a turistas en distintos puntos y el aumento de riñas en el pueblo de Barú, fueron algunas de las acciones delictivas que empezaron a ocurrir en esa isla. Varios de esos casos fueron publicados por este medio, como el que ocurrió en agosto de 2016 en inmediaciones de Isla Grande (Islas del Rosario), cuando una pareja de españoles que iba a bordo de un catamarán sufrió un intento de asalto de su bote auxiliar.
O el caso que ocurrió en mayo en el sector de la Punta de Barú, en el extremo de la isla, cuando seis turistas franceses que estaban en la sede marina de un hotel, fueron sorprendidos por hombres armados que los despojaron de sus pertenencias. Como estos hechos han ocurrido otros. La semana pasada, vigilantes se enfrentaron a bala con sujetos armados que pretendían entrar a robar en un hotel en Barú.
Pero, ¿qué ha hecho que estos actos de inseguridad se hayan desencadenado en la zona insular?, afectando con ello al sector del turismo. A través de una fuente formal, se conoció que la raíz del problema podría estar en el incremento del consumo de drogas alucinógenas por parte de la población joven, sobre todo en Barú.
La Armada Nacional, con sus distintas unidades, como Guardacostas, ha aumentado los controles para evitar acciones de narcotráfico en el sector insular, en donde cuenta con 150 funcionarios que están en puestos fijos y unidades móviles, que hacen fuerte presencia en Tierrabomba, Barú e Islas del Rosario. Ello incluye acciones en tierra, mar y aire.
“Esos controles han hecho que los narcos eviten sacar droga por esta zona, logrando que hayan ido migrando hacia el Pacífico en busca de zonas más ‘seguras’ para sacar sus cargas en lanchas rápidas o veleros. Por ello, muchas veces las cargas de droga que no pueden sacar por la zona insular de Cartagena, se quedan represadas. Ante esta situación, lo que hacen los narcotraficantes es buscar a personas que les guarden la droga, sobre todo a hombres, a los que les pagan con uno o dos kilos de coca. Para sacar dinero, estos hombres lo que hacen es vender esos dos kilos de droga al menudeo en las poblaciones en donde están, y por eso el microtráfico ha crecido. Cuando estos jóvenes que consumen drogas no tienen dinero para conseguirlas, lo que hacen es valerse del oportunismo. Roban celulares cuando tienen la ocasión, o casos como los que hemos visto en los que se van y cometen atracos a turistas en hoteles”, indicó la fuente.
La misma fuente dejó ver que quienes están tras las acciones del narcotráfico en la región, como lo han señalado en ocasiones anteriores la Policía Metropolitana de Cartagena y la Armada Nacional, son miembros de la banda criminal ‘Clan del Golfo’.
En lo que va de este año, solamente en acciones de la Armada Nacional en la zona insular, han sido decomisadas 4 toneladas de cocaína y una de marihuana, que, según las investigaciones, pertenecerían al grupo armado ilegal antes mencionado. También han sido decomisadas 113 armas de fuego.
“A raíz de los robos, esta banda delincuencial notó que la zona se les estaba ‘calentando’, como ellos dicen, porque con estos hurtos se estaba logrando que las autoridades miraran mucho más hacia esa zona e hicieran mayores controles, lo que les dificulta su actividad de narcotráfico. Sabemos que quisieron llamar la atención de estas personas y hubo hasta amenazas, pero es una situación que no está en sus manos y han seguido ocurriendo robos”.
Se conoció que las autoridades tienen individualizados a 18 hombres, la mayoría entre los 19 y 30 años, y que incluso toda esta información sobres estas personas y los hechos delictivos con los que las relacionan es material que está en manos de las autoridades judiciales. En concreto, de la Fiscalía General.
Sin embargo, aún no hay resultados de esas acciones judiciales, del proceso investigativo. Respecto a la ausencia de capturas, esto fue lo que dijo a mediados de este mes el entonces secretario del Interior del Distrito, Fernando Niño: “tenemos indicios de que los sujetos -que están tras los robos- viven en el mismo Barú, pero estamos juntando pruebas para que las órdenes de captura salgan por los delitos de concierto para delinquir, porte ilegal de armas y hurto, porque solo frente al delito de hurto, las leyes colombianas no demandan penas fuertes”.
Este medio supo que entre esas 18 personas se conforman cuatro grupos, que realizan fechorías en distintos sectores. Entre ellos está el sujeto señalado de perpetrar el atraco contra los seis franceses en el hotel en Barú.
Se sabe que tras los eventos de inseguridad, las autoridades crearon un plan integral que incluye puntos como el desarrollo económico, seguridad y gobernabilidad, para trabajar de manera mancomunada en la zona insular. En Barú, la Armada tiene un puesto donde está el Batallón 12 de Infantería de Marina.
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