Desde que se supo que Isaías Ojeda Gil, de 17 años, había muerto por la cuchillada que le propinaron en la madrugada del lunes en el barrio Simón Bolívar, los residentes de esa zona no han podido conciliar el sueño de manera tranquila.
Todo esto debido a que desde la mañana del lunes han ocurrido desmanes provocados por los residentes del barrio Villa Corelca, donde vivía el hoy difunto.
(Lea aquí: Dormía en su casa, se levantó, salió y lo mataron a cuchillo)
El deceso de Isaías causó la ira de sus vecinos, quienes apenas se enteraron del caso, corrieron y rompieron la puerta de una casa en Simón Bolívar, donde reside el presunto homicida.
Las casas permanecían cerradas, y los establecimientos como tiendas y abarrotes abrieron, pero con el temor de que algo más grave volviera a suceder.
La zozobra era tal, que incluso la Policía debió llegar a calmar los ánimos en ese momento. Y aunque todo parecía ya estar en paz, los residentes continuaron con el miedo, pues temen a más represalias por parte de los amigos y conocidos de Ojeda.
Como si fuera poco, y además del temor que sienten tras el homicidio del menor, los residentes de Simón Bolívar expresaron que hoy a las 10 de la mañana se realizará el sepelio de Isaías.
Esto para ellos es motivo de temor, pues creen que se pueden presentar desmanes por lo sucedido, razón por la que durante el sepelio del adolescente, los negocios no abrirán y los residentes del barrio no saldrán a la calle.
“Tememos porque no sabemos qué puede llegar a pasar. Imagina si el lunes nada más partieron la puerta de la casa esa y tuvo que venir la policía, ahora en el entierro ese será peor. Esperamos que la Policía llegue y haga vigilancia, porque no sabemos qué pueda pasar”, expresó uno de los vecinos, que no reveló su identidad.
Comentarios ()