Hernán Yépez Yépez salió ayer bien temprano de su casa, en Villas de La Candelaria. Se despidió como nunca de su mujer y de uno de sus tres hijos, dándoles un gran abrazo. Ese fue el último, pues solo unos instantes después, la muerte lo sorprendió en La Consolata al caer de un techo.
El hombre, de 66 años y quien vivía del arriendo de varias propiedades, se fue a la manzana D de La Consolata, donde tenía una casa de dos pisos. “Hace quince días nos mudamos de allí. La vamos a alquilar y por eso se le están haciendo unos arreglos”, explicó Jesús Yépez, hijo de Hernán.
Este último notó que el techo del segundo piso tenía una gotera, y por eso subió a arreglar el problema. “El techo se partió y mi papá cayó dentro de la casa. Fue a parar a las escaleras y terminó en el primer piso”, explicó Jesús Yépez. Obreros de una construcción contigua notaron lo ocurrido y fueron a auxiliarlo. Llamaron a la Policía y en una patrulla Hernán fue llevado al hospital de San Fernando, donde llegó muerto.
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