Angustia y desesperación en medio del mar. “Cuidado, cuidado”, dijo el conductor de la lancha. Pum, chocaron. “¡Ayúdame, ayúdame!”, gritó un joven a las 7:30 de la noche del domingo en la Bahía de Cartagena. Un compañero lo sacó minutos después del agua. Otra joven quedó amarrada a una cuerda y se salvó.
La lancha, llamada La Mano de Dios, en la que iban chocó con una boya en inmediaciones de la Casa de Huéspedes Ilustres, cerca del Fuerte de San Juan de Manzanillo.
Fueron segundos de pánico y esperanza para que todos salieran con vida; nueve jóvenes regresaban de un paseo en Punta Arena, en Tierra Bomba. Pero dos aún están desaparecidos en el mar.
Auxiliados
Al tiempo que los tripulantes pedían auxilio, la guardia de la Escuela Naval de Cadetes escuchó el choque de la motonave.
Inmediatamente alertaron a la Estación de Guardacostas para que enviaran una unidad de reacción rápida. Al llegar, comenzaron a subir a los jóvenes que estaban allí.
“¡Madre, madre!”, gritó como un quejido uno de los jóvenes rescatados. Al otro lado estaba una joven, quien en medio de lágrimas daba explicaciones de lo que sucedió.
Maderley Echeverry, de 23 años; Carlos Andrés Barrera, de 22; Anays Urbina Zúñiga, de 17; Carlos Alberto Martínez y su hermana Yeisy Martínez fueron rescatados con vida. Carlos Barrera y Yeisy Martínez fueron trasladados al Nuevo Hospital Bocagrande con trauma dorsal y horas más tarde fueron dados de alta.
Treinta y seis horas después del accidente continúan las labores de búsqueda de Paula Andrea García Estrada, de 17 años, y Kleyver Naileth Martínez, de 19 años.
Se regresaron tarde
Según el padre de los tres hermanos, Kleyver, Yeisy y Carlos, se regresaron tarde del paseo.
“Cuando ellos venían dicen que el conductor no vio la boya, que no había claridad. Se golpearon con la boya y empezó a entrar agua en la lancha”, relató el hombre.
Contó que su hija Yeisy se agarró con fuerza a una cuerda y soltó su celular, mientras que su hijo Carlos quedó sentado en la lancha y por eso se salvó.
Segundos después llegó la Unidad de Guardacostas y sacó a los jóvenes que estaban afuera, pero nunca aparecieron Paula García y Kleiver Martínez.
“No llevaban chalecos salvavidas, no sé qué pasó ahí. Yo estaba de guardia”, comentó el hombre.
Salió sin permiso
Liliana Estrada, mamá de Paula García, relató con los ojos rojos de tanto llorar, que Paula salió de su casa en el barrio El Silencio, aproximadamente a la 1:30 de la tarde del domingo, pero sin decirle adónde.
“El día anterior ella me dijo que iba a salir, pero yo le dije que no, que iría a misa”, indicó Liliana en medio de la angustia para que hallen a su hija.
Paula respondió el sábado que no iría obligada a la misa, por lo que el domingo aprovechó que su mamá fue, e hizo el aseo de la casa.
“Ella le dijo al papá que saldría, pero él no le preguntó porque estaba pendiente de un dolor en la pierna izquierda”, explicó Liliana. Después de esto no supieron más de ella, hasta las 8:00 de la noche cuando su novio, Carlos Martínez, le avisó de la tragedia y de que su hija estaba desaparecida en el mar.
Rompió en llanto y trató de mantener la calma pues tiene nueve meses de embarazo.
Todos los jóvenes son amigos cercanos del mismo barrio.
Cronología del hecho
6:45 de la noche del domingo, aproximadamente, salió la lancha de la isla hacia Cartagena.
7:30 de la noche, hora en la que ocurrió la colisión entre la lancha y la boya.
8:00 de la noche, hora en la que fueron trasladados los heridos hacia el Nuevo Hospital Bocagrande.
Según el Comandante de Guardacostas, la embarcación navegaba a más de 15-20 nudos de velocidad y era excesivo pues no debería exceder los 10 nudos.
Primer grado de alcoholemia
Tras el accidente donde hubo heridos y desaparecidos, el capitán fue trasladado a la Estación de Guardacostas con el apoyo del tránsito. Allí le realizaron pruebas de alcoholemia que arrojaron positivo para primer grado.
“Esta información será entregada a la Capitanía de Puerto y posteriormente a la Fiscalía General de la Nación para que comiencen las investigaciones”, indicó el capitán de Fragata Jorge Herrera, comandante de Guardacostas.
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