Se incendia sala de video juegos en Los Palmitos

Los hechos se registraron en el barrio Plaza de la Cruz de Los Palmitos, detrás del Colegio de Bachillerato, ubicada en pleno centro de dicha localidad.
Ayer, la pareja compuesta por Álvaro Falcón Palencia y Olga Cárdenas Jiménez se salvó de las llamas que consumió su residencia cuando dormían.
Cuando era la 1:30 de la madrugada, Álvaro se dio cuenta que la casa era invadida por el humo y empezaba a ser devorada por el fuego.
De inmediato, el joven llamó a Olga y juntos salieron corriendo de la casa para salvar sus vidas de lo que aparentemente fue producto de un corto circuito.
Los hechos se registraron en el barrio Plaza de la Cruz, detrás de la Institución Educativa Los Palmitos, ubicada en pleno centro de dicha localidad.
Álvaro arriesgando su vida logró salvar algo de sus pertenencias de la casa de esquina envuelta en llamas, en la que vivía alquilado hacía 10 meses.
Así pudo rescatar dos televisores, dos videojuegos y una motocicleta, según lo contaron los vecinos que anoche no pudieron dormir por el susto.
Cuentan que pese a los gritos de auxilio, pocos fueron los que corrieron a ayudar a controlar el fuego que consumió el techo de palma, ropa, sillas, camas y todo lo que había.
Los vecinos sacaron sus carros de los garajes por miedo a que fueran alcanzados por alguna chispa y se prolongara el incendio a otras casas de palma del sector.
La Policía Nacional hizo presencia luego de 30 minutos de haber sido enterada del incendio por la comunidad y los agentes llamaron 18 veces al Cuerpo de Bomberos de Corozal.
El cuerpo de socorro de la segunda ciudad no respondió el llamado, aduciendo que no tenían carros disponibles, según lo informó a este medio la comunidad afectada.
Los pocos voluntarios controlaron el fuego lanzándole agua y arena, haciendo que el incendio no pasara a mayores, además bajaron las palancas de la electricidad en medio del susto.
En la casa incendiada funcionaba una sala de videojuegos, en donde hasta las 10:30 de la noche del viernes estuvo divirtiéndose un grupo de niños vecinos de la zona.
Y a la mañana siguiente, ayer, los infantes no escondieron su asombro y tristeza por haberse consumido su sitio de diversión con los videojuegos.
Álvaro Falcón Palencia dice que no tiene problemas con nadie, por lo que descarta que el incendio haya sido provocado por manos violentas.
Solo le agradecen a Dios la oportunidad que les dio para seguir con vida y tener la posibilidad de volver a empezar su hogar y negocio.