Violador pagará 31 años de cárcel

Por miedo a que su mamá le pegara, una niña, de 10 años, soportó en silencio los vejámenes sexuales a los que la sometía su padrastro Orinson de Jesús Martínez Ortega, de 56.Durante un año el sujeto, al que la menor llamaba papá, aprovechó cada oportunidad que quedaba solo con su hijastra para aprovecharse de ella, sin importarle que sufría ataques de epilepsia. Pero el infierno al que la sometía el hombre se terminó el 15 de julio de 2008. Ese día, Martínez Ortega esperó a que su mujer saliera para la tienda y cerró las puertas de su vivienda, luego abusó sexualmente de la menor que estaba en una habitación viendo televisión.
Una prima de la niña llegó a la vivienda en ese preciso momento, y al notar una actitud sospechosa en Orinson Martínez, decidió contarle a sus familiares que algo malo sucedía. La menor fue traslada al Hospital Universitario del Caribe y de allí remitida al Hospital Napoleón Franco Pareja, donde los médicos sospecharon que era víctima de una violación. Un examen en Medicina Legal confirmó las sospechas de los médicos.
La madre de la pequeña se negaba a poner el denuncio en contra de Martínez, porque decía que él era inocente, sin embargo, al ver las pruebas contra el sujeto, no tuvo otra alternativa que denunciarlo.
La niña narró que no se acordaba las veces que su padrastro la abusó, ya que eso sucedía cada vez que su madre la dejaba bajo el cuidado de él.
En un largo y engorroso proceso judicial, la Fiscalía probó que Orinson Martínez era culpable del delito de acceso carnal abusivo con menor de 14 años agravado y el juez Quinto Penal del Circuito lo condenó a pagar 31 años y 8 meses de cárcel.
Ese delito no contempla rebaja de penas por buen comportamiento o estudio, lo que significa que Martínez pagará la totalidad de la pena impuesta en una prisión.