Andrea Echeverri: La Ruiseñora del rock

Andrea Echeverri solo usa dos guitarras y un grupo de instrumentos de percusión lo que da la sensación de un sonido básico.  Dice que “se debe a que estoy buscando mi sonido. Lo hemos planteado como que estamos buscando la “rocka”, es decir, la feminidad dentro del rock”.
La Reina del Rock Latinoamericano, lanzó oficialmente su tercer disco en solitario titulado “Ruiseñora” el pasado 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer, en el Teatro Municipal Jorge Eliécer Gaitán (Bogotá).
Este concierto además de agasajar a todas las mujeres del mundo en su día, tuvo un sentido especial, dado que, uno de los temas importantes de este trabajo discográfico es “Florecen”, dedicado a la psicóloga y feminista Florence Thomas, defensora de los derechos de las mujeres en Colombia desde hace 40 años. La composición fue escrita por Andrea después de haber leído su libro “Conversaciones con Violeta. Historia de una revolución inacabada”.

El nuevo álbum
En este disco se aprecia un “diseño percutivo” integrado por maracas, cajón, darbuka, chéqueres, guacharacas y panderetas, que muestran “con sabor femenino y acústico” la relación entre la música y la cerámica. Y como ésta a través del tiempo ha fortalecido el arte musical y sus instrumentos, puesto que, ha sido el barro el primer elemento fundido para dar forma al más antiguo tono de instrumentos musicales, conocido como percusión.
“En la carátula del disco estoy disfrazada de catrina, entonces es como la primer asociación, jugar a la portada del disco y digamos que, eso de la muerte va unido a varias letras de mis canciones, las cuales hablan de la guerra y la violencia. Y es asombrosa esa tradición mexicana que celebra el día de los muertos de una manera festiva, es como traer esa tradición a un país como Colombia donde la muerte la tenemos al lado”.
Si “Florence”, evoca la mítica victoria de la profesora feminista que supuso el inicio de una nueva etapa en Colombia que reivindica la dignidad y los derechos de la mujer.
“Fusil”, otro de los temas del disco, nos habla de las vicisitudes de un país. La violencia, la guerra, la muerte, la desilusión, son los argumentos referenciales. Canciones que plasman los ideales feministas y la historia de Colombia.
Andrea intenta en este disco  manifestar sus tendencias sociopolíticas en sus letras y ritmos. Se mira a sí misma. Escudriña en su experiencia, en su país y en su tierra, y eso es lo más importante en un mundo globalizado y con tanta frivolidad torpe y artificial. Es un trabajo con mayor compromiso social que los anteriores. Aunque esa búsqueda sutil de una autoafirmación femenina surgida desde ella misma, es un proceso que empieza con “Delia y los Aminoácidos”, sigue con “Aterciopelados”, luego con el disco “Dos” y ahora llega “Ruiseñora” que, transformó su actitud y sus sentimientos en una activista. Sumando sus conciertos a causas antibelicistas, en pro de lo femenino y lo ambiental.

El sonido de Colombia
Me gustan muchos artistas colombianos. Por ejemplo, me fascina Petrona Martínez, Totó La Momposina, Etelvina Maldonado (q.e.p.d.). También admiro a Jorge Velosa y Susana Baca. De los jóvenes disfruto a Humberto Pernett, Camila Moreno, Julieta Venegas y Edson Velandia, y con cualquiera de ellos (as) compartiría escenario.
Con Martina Camargo, una folclorista de San Martín de Loba (Bolívar), has cantado “Corre morenita”. ¿Tienes alguna influencia de la música del Caribe colombiano?.
En un país como Colombia donde hay tanta diversidad de música es imposible evitar la influencia del Caribe. Las músicas entran de puro caracol, por ejemplo, la que escuchas en la tienda o en el bus.


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* Periodista de la Universidad Central de Bogotá.