Julieta Piñeres, una novia con estilo

Todos conocen a la presentadora de Estilo RCN. Sus correrías por las ferias de moda del país respaldan la visibilidad que le da la TV con años de experiencia en su profesión natural, el modelaje.
Julieta ha sido imagen de Cali Exposhow. Ha modelado en todas las pasarelas nacionales y en varias internacionales. Es antropóloga de profesión y ese tema que parecía truncado por su trabajo en los medios, complementa diariamente las bases periodísticas edificadas con la ayuda de Yamid Amat Serna, en los micrófonos de La F.M. Radio.
Dos cosas aprendidas le ayudan a desempeñar su trabajo como presentadora y locutora: saber adaptarse y recibir críticas de todo tipo. Lo primero se lo dejó la llegada a Bogotá a los 12 años, un viaje que alteró por completo su vida en ese momento, pero que sería cuestión de tiempo asimilar y disfrutar.
Lo segundo se lo ha dado su experiencia en las pasarelas. Modelando desde los 16 años, sabe perfectamente que no se puede tener contento a todo el mundo y por eso maneja de la forma más natural el hecho de que hablen de ella. Tanto así, que se declara una adicta de las opiniones.
“En modelaje te dicen que estás muy alta, que estás muy flaca, que tienes mucha cadera, mucha teta, que tienes poca nalga, que caminas torcido, que esto, que lo otro. Recibes millones de críticas buenas y malas; te opinan todo el tiempo…; y me acostumbré, porque es imposible estar como la gente quiere. Yo pido opiniones todo el día, me volví adicta al tema”.
Pronto, vestida de blanco
Aunque no es agorera y le gustan las opiniones tiene clarísimo que sobre su vestido de novia no opinará Maurizio Mancini, el empresario dueño de restaurantes con quien se casará el 15 de diciembre en Cartagena, su ciudad natal.
“No le mostraré el vestido, porque él opina de todo. Va y me opina del vestido y me da rabia. Quiero escoger el que a mí me guste y ojalá le impacte. Todo el mundo me dice que como es en la playa, debo ir muy sencilla. ¡No! Es el día de mi matrimonio y no voy a ir de túnica blanca. Busco un vestido elegante e importante, sin que sea pesado ni caliente, sin que me ‘encarte’ para subirme a la lancha (risas). No quiero que sea strapless y ese es el problema más grande, pues todos los vestidos de novia lo son”.
Julieta cubrirá los Olímpicos y regresará el 13 de agosto. “Ahí sí me concentraré en eso y solo en eso. Siento que debo evacuar lo de Londres para meterme de lleno en el tema de la boda. En cuanto a la luna de miel, estamos indecisos. Nos encanta viajar juntos; este año ya fuimos a Nueva York, Panamá y Brasil y habíamos pensado en las islas del Caribe para ir después de la boda, pero están llenísimas. No es el mejor momento, hay poca privacidad. Vamos a ver qué otra cosa se nos ocurre”.
Después de siete años de noviazgo le parece un poco difícil imaginarse la vida en matrimonio. Aunque cree que todo será igual, en otros momentos asume que es una relación con más responsabilidad. Un compromiso al cual ha sabido responderle Maurizio, quien dejó sus horarios nocturnos de oficina, tras la sugerencia de Julieta, y cambió los bares por los restaurantes. 
“Lo hizo también por él, pues su talento es enorme para el tema de los restaurantes. Cocina increíble, tiene buen gusto, le encanta atender y la gente lo quiere; cuando se dio cuenta que lo podía hacer muy bien, en él ha crecido una confianza de que ese es el camino…; y yo lo apoyo completamente”.
Antropóloga con mucho estilo
Dejando de lado el tema de la boda, le preguntamos por su vida profesional, pues a pesar de que se va a casar y  quiere tener hijos, es consciente de la dinámica de los cambios. Primero se adaptarán como esposos y luego pasarán a otro nivel. Mientras tanto, la idea es seguir creciendo juntos.
- ¿Qué es lo positivo de ejercer en medios siendo antropóloga?
¡Todo! Creo que tengo una mirada diferente, tolerante y comprensiva de los estilos de vida de otra persona. Estudié Antropología porque reunía las cosas que me interesan. Me gusta la geografía y la biología, viajar, conocer culturas y diferentes creencias. Me abre el campo de investigación para contárselo a los demás y finalmente eso es el periodismo.
- No es normal ver una antropóloga modelo. ¿Recuerda anécdotas en la universidad?
En ese momento me daba como pena, yo trataba de disimular el mayor tiempo posible que era modelo. Si tenía unas fotos, me aseguraba de desmaquillarme hasta la última pestaña antes de llegar a clase. Cuando iba a faltar, jamás decía que era por un desfile, prefería entregar los trabajos más temprano.
No me parecía que a mis compañeros les pareciera interesante, no quería sentirme diferente al resto. Nunca fui famosa, ni reconocida por eso. Simplemente, si alguien me lo preguntaba, se lo decía.
- ¿Una enseñanza del mundo de los medios?
Digamos que en televisión aprendí a pensar y a hablar al mismo tiempo. Es muy difícil manejar el apuntador, es una habilidad que me tomó muchísimo tiempo tener, creo que ahora lo hago mejor.
Me enseñó que el trabajo en equipo es fundamental. También que nadie es indispensable; existen cientos de niñas que quieren hacer lo mismo que yo, así que debo esforzarme muchísimo para ser diferente, para tener una identidad. Y la radio es otro universo. Me ha dado la preparación, el estudio y la responsabilidad al contar las cosas. Yo cuento mis propios temas, los investigo y si me equivoco, soy yo la que se equivoca.
-  Yamid Amat Serna es su maestro en radio…;
Cuando entré a Estilo hice una gira de medios para que me conocieran. Y estaba incluido este programa de radio. Yamid me dijo: ‘Chévere, ¿por qué no vienes mañana?’. Y así fui un día y otro y otro. A los dos meses se hizo oficial. Ha sido bonito, porque él es una persona que se entrega a enseñar y alguien como yo, sin experiencia en radio, necesita que le expliquen exactamente cómo se hacen las cosas.
No ha sido fácil, me equivoco un montón, hasta me invento palabras (risas)…; Pero la paso muy bien, meto todo lo que quiero meter. En Estilo me pasan el libreto y lo leo, pero en radio soy responsable de todo mi contenido.
-¿Cuáles son los contenidos que le llaman la atención?
Me interesan los temas de biología y medio ambiente. Me encantan la cultura, el entretenimiento y el arte. Voy viendo qué pasa en Bogotá, qué pasa en el mundo. Hablo de moda. En fin, intento involucrar todo lo que me gusta.
- ¿Por qué  cree que se ha aceptado tan bien su trabajo?
A mí me ven desde chiquita. Llegué a los 17 años de uniforme a hacer casting por primera vez. Después me vieron con los libros de Antropología. Luego vieron que entré a Estilo y fui capaz, pero seguí yendo a todas las ferias de moda. Nunca abandoné nada de lo que hacía desde esa edad. Han pasado 10 años desde que trabajo con fotógrafos, modelos, presentadores, directores y sigo con ellos en otra etapa de mi vida, con otras cosas en la cabeza, pero me han visto crecer.