Propoleo

Por muy buenas razones le llaman el “antibiótico natural”. Y eso no es todo: es antiparasitario, analgésico, antioxidante, cicatrizante…; Ante un producto como ese, ¡las abejas merecen nuestro agradecimiento! Las abejas no saben que esa resina de las cortezas de árboles que ellas recolectan para tapar los agujeros o endurecer las paredes interiores de sus colmenas es un producto indispensable en nuestro botiquín casero. En efecto, los estudios científicos corroboran la sabiduría de las abuelas: el propóleo contiene no sólo antibióticos naturales, sino sustancias biológicamente activas que le dan a nuestro organismo un sinnúmero de beneficios. Por citar algunos: - Es un potente antigripal, anti-inflamatorio, antibacteriano y anestésico. Sus rápidos efectos en casos de dolor de garganta son sorprendentes. - Ayuda en las afecciones respiratorias. - Previene la anemia. - Normaliza la tensión arterial. - En caso de úlceras estomacales, es un excelente cicatrizante. También da muy buenos resultados cuando se aplica directamente sobre heridas y quemaduras pequeñas (además las desinfecta). - Regula el apetito. - Es un efectivo antialérgico y antioxidante natural. MÁS PROPIEDADES - Como es rico en flavonoides, potencia las defensas del organismo. Favorece la formación de anticuerpos. - Fortalece el esmalte dental, disminuyendo la posibilidad de que aparezca placa bacteriana y caries. - Regula el apetito y protege el hígado. - Es rico en calcio, hierro, magnesio y cinc.