En momentos difíciles como los que vive el mundo entero, con catástrofes naturales –que incluyen las graves inundaciones en nuestro país y como resultado, miles de damnificados-, volcanes en erupción y fuertes tornados, considero importante que todos entremos en meditación y volvamos a nuestro centro. Hoy comparto con ustedes el siguiente mensaje.
Ten presente...
A eso de caer y volver a levantarte, de fracasar y volver a comenzar, de seguir un camino y tener que torcerlo, de encontrar el dolor y tener que afrontarlo, a eso no le llames adversidad, llámale: SABIDURÍA.
A eso de sentir la mano de Dios y saberte impotente, de fijarte una meta y tener que seguir otra, de huir de una prueba y tener que encararla, de planear un vuelo y tener que recortarlo,
de aspirar y no poder, de querer y no saber, de avanzar y no llegar, a eso no le llames castigo, llámale: ENSEÑANZA.
A eso de pasar días juntos, radiantes, días felices y días tristes, días de soledad y días de compañía, a eso no le llames rutina, llámale: EXPERIENCIA.
A eso de que lloras, sonríes, te alegras, te enojas, reconoces el error e intentas enmendar lo que hablas, buscas quién te escuche por momentos, igual estar a solas, no le llames inestabilidad, llámale: HUMANIDAD.
A eso de que tus ojos miren y tus oídos oigan, y tu cerebro funcione y tus manos trabajen,
y tu alma irradie y tu sensibilidad sienta, y tu corazón ame, a eso no le llames poder humano, llámale: MILAGRO.
A eso de que te aferras a creer en un mundo mejor, de seguir amando aún en medio de dolores y heridas, de perdonar, de volver a abrazar, estrechar una mano después de haber sido defraudado, a eso que sigues orando, viviendo en armonía y tolerancia, no le llames esfuerzo propio. Llámale: MISERICORDIA.
No olviden escribirme a vienar@nueva.co y en twitter a @VienaRuiz
Feliz fin de semana.
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