Los campesinos cuentan que en las últimas semanas han caído lluvias que inutilizan las carreteras. Su temor consiste en que ya se acerca abril con la cosecha de aguacate, y las lluvias serán peores.
Japón se convirtió en el más reciente mercado para el aguacate colombiano. Ese país compra en los mercados internacionales más de 211 millones de dólares anuales.