Un senador planteó la situación, lo que provocó cuestionamientos por la transparencia gubernamental y la democracia, a pocos días de las presidenciales.
La petición de Alexander Vega tenía muchos detractores. El grupo que solicita su renuncia crece, mientras que Gustavo Petro tildó el pedido como un “golpe de Estado”.
Jurados mirando lejos o hablando entre sí fueron escenas recurrentes a pie de urna. Ni la importancia ni lo inédito de la ocasión atrajo el número de jóvenes esperados.