Una de las víctimas, Hedaya, proveniente de una familia neoyorquina judía, es aún reclamada a las autoridades por sus familiares, que esperan darle sepultura.
El derrumbe del 24 de junio en el edificio Champlain Towers South, situado a la orilla del mar, dejó 97 muertos, y aún falta identificar a una persona que está desaparecida.