Investigadores han observado que los deportistas presentan una adaptación de su corazón al entrenamiento que puede incluir un aumento de las “trabéculas”.
Una dieta sana, abundante agua, hacer ejercicio, mantener un peso adecuado y reducir el estrés pueden disminuir el riesgo de enfermedades cardiovasculares.
Una experta nos da algunas recomendaciones para hacer ejercicios con herramientas improvisadas. Bolsas de granos y botellas de litro pueden ser sus aliados.
La TTR también aparece asociada con la cardiomiopatía por amiloides, una condición hereditaria que causa depósitos de proteínas anormales en el corazón.