Las minas de carbón siguen registrando una alta siniestralidad en el país asiático, aunque en los últimos años el número de accidentes mortales se ha reducido de manera significativa.
El trabajo del cuerpo de bomberos logró sofocar las llamas y se evitó que la situación se saliera de control. El reporte es de cuatro personas heridas.
Las imágenes son aterradoras: paredes y pisos llenos de sangre y enfermeras y médicos intentando cerrar la puerta por donde querían ingresar los sicarios.
La policía japonesa rodeó una oficina postal donde se había atrincherado un hombre armado y dijo que el caso podría estar relacionado con un aparente tiroteo en un hospital.