La exposición constante a las radiaciones ultravioleta ha sido vinculada con cambios en la coloración de la piel, quemaduras y presencia de arrugas prematuras.
Esto trae como principal consecuencia un aumento significativo de la temperatura en la capital del país. Han llegado a registrarse 24 grados centígrados. A lo anterior se le suman bajos niveles de ozono.