El Gobierno sirio tiene el control total de Homs desde 2014, cuando los insurgentes se retiraron del centro en virtud de un acuerdo de tregua mediado por la ONU.
Los terremotos que arrasaron a Siria a comienzos de febrero causaron daños directos de 5.100 millones de dólares, lo que equivale al 10 % del PIB sirio.