El hecho investigado ocurrió en la cárcel de mujeres de Cartagena. El hombre, quien fue destituido, también habría permitido el ingreso de celulares al penal.
El hecho habría ocurrido en el año 2002 mientras le hacía un masaje al acusado en la mansión del magnate, en la cual trabajaba. La víctima narró la situación detalladamente.
La justicia inició una investigación preliminar, un primer paso de cara a determinar si se puede abrir un proceso penal contra el cardenal Jean-Pierre Ricard.