Indudablemente, actriz

Camaleónica, como suelen ser las actrices preparadas en las tablas, así resulta esta cartagene-ra que ya tiene un lugar especial en la televisión y un pasado fortalecido con actuaciones en España. Paula Castaño no es actriz por azar, pese a ha-ber descubierto su talento después de una pequeña participación en el colegio, en un papel donde sólo de-bía sonreír, y el director entendió que tenía madera. Dice que en ella la evolución de su talento llegó de manera particular, porque en todos los acto-res y actrices ese deseo se plasma con seguridad, en Paula estaba tal vez un po-co escondido, pero nu-triéndose de experiencias que más tarde darían un buen resultado. Fue en el colegio Montessori, donde termi-nó el bachillerato, tiempo en el cual aún no se deci-día por una profesión cuando apareció el espíritu de la actuación, allí tuvo la oportunidad de conocer el interior de una obra de teatro y vivirla. El papel protagónico no tardó en llegar y a la vez hacer que Paula entendie-ra que ahí tenía futuro, pues su talento presagiaba éxito en las tablas. Un paso seguro Al salir del colegio todo estaba decidido, estudiaría actuación, pero antes tuvo la oportunidad de partici-par en la película “El Cie-lo”, rodada en Cartagena y dirigida por Alessandro Basile. Esta participación le dio la certeza que necesitaba para tomar la decisión que encausaría su vida, allí in-terpretó a “Ángela” una prostituta, novia de un personaje encarnado por Ramiro Meneses, esa ex-periencia fue el gran inicio, pues la destreza adquirida allí no tenía comparación. España era la próxima parada de este viaje a tra-vés de la actuación. Allí la carrera de Arte dramático ocupó su tiempo y sus sueños, pues incursionó en la Escuela “La Cuarta Pa-red” de Madrid, que le dio la oportunidad de divisar los secretos del teatro en un continente donde se le profesa todo el respeto a este arte. Viajó mucho y en medio de ese estudio dedicado, participó en el rodaje de un cortometraje, más prácti-cas que se unían a su se-lección de buenos trabajos. Sintiéndose una extraña en Madrid, alejada del mar que la hacía pensar en Cartagena, decidió partir a Barcelona, ahí sintió que volvía a lo suyo, a sus pa-seos en bicicleta, a su coti-dianidad. Entonces empe-zó una especialización en Dirección de actores, que la ubicó rápidamente en el teatro local por más de dos años. Barcelona tuvo un aporte valioso en la vida de Paula Castaño, pues aprendió todo lo que tiene que ver con dirección, ac-tuación y producción, im-portantes para direccionar su carrera como actriz. El regreso La nostalgia no se hizo esperar tras siete años de intenso aprendizaje fuera de casa. Un buen día pla-neó unas vacaciones de seis meses en Colombia y obviamente su destino ideal era Cartagena. El regreso coincidió con el Festival de Cine, donde además de contactar y co-nocer gente involucrada con el medio, fue convoca-da al casting de la película “El arriero”, del bogotano Guillermo Calle. Fue también un regreso a la pantalla grande, prota-gonizando la cinta que toca el escabroso mundo del narcotráfico. En esta histo-ria, Paula interpreta a “Virginia” una barranqui-llera y junto a ella actuaron Julián Díaz y María Cecilia Sánchez. La película se rodó en Madrid, Barranquilla y Bo-gotá, un verdadero reto para la actriz, que una vez terminado el papel decidió quedarse en su país para emprender un nuevo ca-mino. El trabajo que inició entonces también tuvo al-go de academia, pues es-tuvo en talleres del Festi-val de Cine enseñando análisis dramático. Paula vio en Colombia una nueva oportunidad pa-ra expresar su arte, y la televisión estaba allí espe-rándola. De esta manera hizo casting para la teleno-vela “Chepe Fortuna” y con un monólogo de diez minutos escrito por ella, logró el papel de “Mila-gros”. En este personaje sale a relucir el aspecto cama-leónico de Paula Castaño, su aspecto es el de una ni-ña y confiesa que preparar este papel ha sido muy bo-nito, pues la novicia que interpreta, es muy dife-rente a ella. “Milagros” está defini-da dentro de la historia como una mujer sumisa y reprimida, eso ha sido in-teresante para Paula, es un reto caracterizar un perso-naje así, pero afirma que todo va a cambiar dentro de la trama y las sorpresas serán divertidas. Paula Castaño siempre ha estado involucrada con el teatro, pero también ha sido muy cercana al cine, ahora la experiencia es otra, por eso define la te-levisión como un teatro con cámaras. Su faceta artística no acaba aquí, tiene muchos proyectos, entre esos una obra de teatro que está es-cribiendo y que será es-trenada una vez culmine la novela.