La temporada otoño-invierno se manifiesta en la moda y el maquillaje no escapa a la misma, con una paleta interesante, donde se fusionan tonos que iluminan el rostro, al tiempo que llevan a la mujer a una experiencia única de belleza.
Lo que marca la pauta actual, se ha denominado “Otoño salvaje” e “Invierno credo”, los cuales se manifiestan en tonalidades especiales que irradian belleza. El primero, captura el sol del ocaso y lleva todo a la tonalidad oro, que al impregnarse de naturaleza, da como resultado el verde oliva, amarillos naranjas, rojos envejecidos y los tonos café, ciruela y ocres.
Este segmento se identifica con los colores claros que iluminan, como los beige y mantequilla, también los amarillos suaves; un profundizador que es el tono ciruela, acompañado siempre del negro. En los tonos medios están los ocres o tonos tierra.
Por su parte el invierno se caracteriza con azules sacados de todas las tonalidades del mar, los índigos, grisáceos, el petróleo. Los que suavizarían esta propuesta serían los perlas y el gris hielo que se impone notablemente.
La hora perfecta
Como se trata de dos propuestas, la fría y la cálida, requieren de un buen acompañamiento para que se dé la armonía en el rostro, advierte el maquillador profesional Germán Sánchez. En el día se usan tonos muy suaves de la propuesta cálida, aplicando un rubor color ladrillo suave y un labial naranja u ocre.
Ese mismo concepto al llevarse a la noche, cambia el panorama, teniendo en cuenta que el maquillaje es muy natural. Aquí se enmarcan los ojos con tonos fuertes como el negro, ladrillo, ocres y los labios pierden protagonismo al aparecer sólo con brillos.
El énfasis en pestañas es importante en este tipo de maquillaje, lo mismo que las cejas, que en esta temporada vuelven a ser muy perfectas y delineadas.
Con respecto a los productos invernales, en la mañana se mezclan los tonos arena y grises de la perla, se aplica en un solo fondo en el ojo y se complementa con un toque vintage con delineador, mucha pestañina y se marcan los labios con tonos fucsias y rojos.
Para la noche, prima la armonía del maquillaje, entonces los azules se aplican mezclados con los grises, hasta lograr un tono muy interesante, también se contrasta el perla con azul o negro. Los labios pierden fuerza y se presentan en rosa suave.
Los esmaltes toman importancia en esta temporada y los colores se usan sin precaución, indica Sánchez, quien sugiere ampliar la expectativa con respecto a nuevas propuestas.
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