Las iglesias de Cartagena reúnen parte del legado histórico, social y religioso de la ciudad, por eso su restauración y mantenimiento es importante para la ciudad que busca mantener su patrimonio histórico intacto y vigente a las nuevas generaciones.
Según expertos en restauración de bienes patrimoniales, el agente más grave que puede afectar una iglesia es la humedad porque puede provocar goteras, desprendimiento de pañetes, fallas estructurales, entre otro daños. Si hay filtraciones se van a generar muchos daños a corto y largo plazo.
Con las iglesias también ocurre como con los balcones y fachadas, que están expuestas a la salinidad del mar, a la humedad y al viento y si no se hace mantenimiento van generando daños y afectando las estructuras de las edificaciones.
Por eso la recomendación es hacer mantenimientos periódicos, “hay que realizar planes de mantenimiento, donde las cubiertas se pueden revisar cada invierno, cada seis u ocho meses”, afirman los expertos.
Gina Guardo, especialista en Conservación y Restauración del Patrimonio Arquitectónico, explica que para la conservación de estas edificaciones también es importante conservar las técnicas de construcción originales. “Las reparaciones que se hagan deben mantener al máximo las técnicas constructoras tradicionales, si se mezclan con técnicas constructivas contemporáneas los materiales que ya están allí no asimilarán bien los nuevos materiales y crean conflictos que pueden resultar dañinos para la estructura”.
¿CUÁL ES EL PROCESO QUE DEBEN SEGUIR LAS IGLESIAS CUANDO NECESITAN INTERVENCIÓN?
Alicia Castellar, arquitecta asesora de la División de Patrimonio del Instituto de Patrimonio y Cultura de Cartagena (IPCC), explica cómo es el proceso para que una iglesia realice reparaciones o mantenimiento ante las instituciones competentes. “Las iglesias son propiedad de la curia, declaradas bienes de interés cultural nacional, por lo tanto deben acudir a dos instancias. La primera es radicar el proyecto ante la División de Patrimonio, donde el Comité Técnico de Patrimonio, lo evaluará, éste debe ser aprobado con un concepto favorable, una vez obtenga dicho concepto, se le remite al Ministerio de Cultura, donde es evaluado por el Concejo Nacional de Monumentos, que debe aprobar en segunda instancia con igual concepto favorable las obras que se vayan a realizar”.
Las curias entonces deben obtener la licencia de construcción o licencias urbanas ante las curadurías urbanas, una vez hecho esto ya pueden comenzar las obras.
Posterior a la aprobación del proyecto de intervención en estos bienes, el IPCC hace seguimiento e inspección de las obras para que no excedan lo dispuesto por el Comité Técnico de Patrimonio y el Ministerio de Cultura.
Las obras pueden ser de acondicionamiento o de restauración monumental, cuando son obras de mantenimiento se aprueba favorablemente en la ciudad y se notifica al Ministerio de Cultura lo que se vaya a realizar, siguiendo el mismo proceso de las dos instancias expuestas anteriormente.
Algunas de las iglesias que han sido intervenidas siguiendo este proceso son las Iglesias de Santo Toribio y la Iglesia de la Santísima Trinidad.
IGLESIAS, BIENES DE INTERÉS CULTURAL NACIONAL
Según el concepto del Ministerio de Cultura, un bien de interés cultural es un bien material como los monumentos, áreas de conservación histórica, arqueológica o arquitectónica, conjuntos históricos, o mediante otras denominaciones vigentes antes de la promulgación de la Ley 1185 de 2008.
Los bienes de interés cultural pueden pertenecer al ámbito nacional, departamental, distrital, municipal, de los territorios indígenas o de las comunidades negras.
Entre las iglesias que se catalogan como bien de interés cultural en la ciudad están: Catedral de Santa Catalina de Alejandría, el Claustro de La Merced, Convento de San Diego, Iglesia de la Santísima Trinidad, Iglesia de Santo Toribio, Iglesia y Claustro de San Pedro Claver, Iglesia y Convento de Santa Clara y la Iglesia y Convento de Santa Teresa.
En Manga, El Cabrero y el Pie de la Popa se encuentran otros bienes de interés cultural.
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