Después de varios meses de espera y hasta de promesas incumplidas, por fin se conocen noticias que dan luces sobre la farola de Santo Domingo, esa partecita del patrimonio de Cartagena arrumada en una bodega a la espera de su arreglo.
Después de varios años de su desmonte de la plaza por el consorcio Alumbrado Público ante “el peligro que representaba por el mal estado que presentaba la estructura”, según se dijo en una oportunidad, y tras el anuncio de varias fechas para su reparación y puesta en funcionamiento, ahora por fin se dan noticias que indican que el arreglo de la farola va en serio y por buen camino.
Luis Mejía, gerente técnico de Alumbrado Público, dijo que la Concesión Alumbrado Público decidió apersonarse del asunto, con la colaboración de la Escuela Taller Cartagena de Indias.
Dijo que en su momento se contactaron a unos 25 herreros de la ciudad para ver qué podían hacer de la farola, pero ninguno se “le midió” a los arreglos, dado que ese elemento está construido en un material que no es fácil de manejar y se necesita mucha experiencia para restaurarla y dejarla idéntica.
“Porque no solo es trabajarla, sino dejarla igual. Por eso recurrimos a la Escuela Taller”, dijo Mejía.
Cree que si todo sale como se tiene previsto, la farola puede estar lista antes de las Fiestas de Independencia.
QUÉ DICE LA ESCUELA TALLER
Consultada la Escuela Taller al respecto, esta no solo confirmó lo dicho por el gerente técnico del consorcio de Alumbrado Público, sino que dio nuevas luces sobre la farola.
Un vocero autorizado de esa institución dijo que efectivamente la concesión Alumbrado Público “contactó recientemente a la Escuela Taller Cartagena de Indias para la realización de la obra de restauración de esta farola, la cual requiere trabajos de retiro de óxido, reemplazo de algunas piezas, reparación de sistema eléctrico, y finalmente la reinstalación en el sitio del que fue retirado”.
Dijo que esos trabajos serán ejecutados por los maestros de la Escuela Taller y los estudiantes de los talleres de forja, soldadura, electricidad, albañilería y cantería de esta institución, la cual se dedica a la formación de jóvenes en oficios relacionados con la conservación del patrimonio.
“El contrato para la ejecución de estos trabajos aún no se ha oficializado y por tanto no hay un tiempo definido para la terminación de los mismos. De momento, la farola está guardada en la sede de la Escuela Taller, en la Calle del Guerrero de Getsemaní”.
Esto último contrasta con lo afirmado por voceros de Alumbrado Público, quienes habían afirmado que la farola estaba en una bodega de la concesión, lo cual demuestra no solo el desinterés que el tema había despertado, sino la desinformación que rondaba al respecto.
“En cualquier caso cabe aclarar que el mantenimiento de estos sistemas de iluminación de las calles de la ciudad corresponde directamente a la Concesión Alumbrado Público de Cartagena”, dice la Escuela Taller.
SOBRE LA HISTORIA DE LA FAROLA:
Germán Bustamante Patrón, director general de la Escuela Taller, explica que la farola de la Plaza Santo Domingo fue traída de España a Cartagena a mediados del siglo XX y se trata de un artefacto metálico de origen sevillano.
SEGUIREMOS…;
Mientras se conocen esas noticias, este medio seguirá tras la pista de la farola de Santo Domingo, en su campaña por el rescate y respeto del Centro Histórico de Cartagena, verdadera razón de ser del título que le dio la Unesco a la ciudad: ser Patrimonio Cultural de la Humanidad.
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