La iluminación que le dará toda una nueva cara al Castillo de San Felipe quedó en manos paisas y caleños. El ganador de este concurso fue el Consorcio de Arquitectura y Paisaje (Medellín), y Colectivo 720 (Cali). Ganó porque logró conectar muy bien la iluminación del lugar con un extenso estudio histórico.
Mejor dicho, al Castillo no le van a poner luces por ponérselas. Esta propuesta, elegida por la Escuela Taller Cartagena de Indias (ETCAR), el Ministerio de Cultura y la Sociedad Colombiana de Arquitectos (SCA), busca que los visitantes puedan aprender de historia a través de toda la iluminación. Que sea bonita, pero sobre todo útil.
La idea del concurso era darle visibilidad a este atractivo turístico también en las noches. Así, los futuros visitantes podrán vivir una experiencia distinta a la que se conoce hasta ahora en la fortificación.
Aunque por ahora no se conocen muchos detalles de cómo quedaría la iluminación del Castillo, lo que sí se sabe es que una de las ideas de proyección es que los visitantes puedan ver la llegada de barcos invasores a la fortificación y cómo este Castillo, hace unos 300 años, defendía a la ciudad. Toda una guerra proyectada en luces.
El consorcio ganador está encabezado por el arquitecto y magíster en paisajismo, Jorge Emilio Buitrago, y conformado por los arquitectos Luis Orlando Tombe, Jaime Eduardo Cabal, Mario Fernando Camargo, Adriana García Londoño y Andrés Felipe Álvarez. Contó, además, con asesoría en iluminación de la firma Fast Lighting S.A.
“Nos interesó mucho el Castillo desde la historia que jugaba, no solo en Cartagena y Colombia, sino su propia historia. Además de cómo un proyecto aparentemente abstracto, como iluminar bien el Castillo, requiere de unos criterios patrimoniales muy especiales para cumplir con el objetivo que es resaltar un monumento”, cuenta Buitrago.
No es solo ponerle luces, es vivir toda la experiencia del Castillo aún sin la luz del sol. “Quisimos buscar la forma de aportarte al visitante una experiencia adicional, pensar en cómo iluminarlo y pues que la forma de hacerlo sirviera para señalizar el Castillo, resolver una serie de elementos que creemos que podrían mejorar en la visita de cualquier persona, ese fue parte del valor agregado que le pusimos y que resaltó el jurado”, puntualiza el experto.
El cambio, sin embargo, se demora. Aún no están formalizados los términos de ejecución del contrato y los recursos no están del todo claros, pero “este año las entidades encargadas van a buscar los recursos y los diseños pasarán a una fase de desarrollo para que el próximo año se empiecen a ejecutar”, aseguró Buitrago.
El segundo lugar en este concurso lo ocupó el Consorcio Arquitectura y Espacio Urbano; mientras que el tercer lugar fue para el equipo de arquitectos liderado por el cartagenero Alberto Herrera Díaz. Los tres primeros lugares recibirán un incentivo económico. Lea aquí: Así quedará la iluminación del Castillo de San Felipe de Barajas, en Cartagena.
PREMIO
El consorcio de Arquitectura y Paisaje + Colectivo 720 recibirá un premio en dinero y además puede suscribir un contrato con la ETCAR para el diseño detallado de la iluminación del Castillo de San Felipe de Barajas.
El director general de la ETCAR, Jair Tuñón Arroyo, afirmó que los ciudadanos y visitantes no tendrán que preocuparse, porque se tomarán las medidas necesarias para reforzar la vigilancia y que no se presenten robos en estas visitas nocturnas, cuando esté habilitado. Hoy hay 10 vigilantes en el Castillo y para cuando se habilite en las noches habrá 10 más.
PROCESO DE SELECCIÓN
Desde el pasado 6 de abril hasta el martes de 3 mayo de 2016 se abrieron inscripciones para el concurso Público Internacional a Dos Rondas en el cual podían participar las personas naturales o jurídicas nacionales o extranjeras, ya sea individualmente, en uniones temporales o consorcios.
En la primera ronda los jurados eran los arquitectos Rodolfo Ulloa Vergara, Pedro Ibarra Jiménez, Alfonso Cabrera Cruz, María Teresa Sierra y Daniel Bermúdez Samper.
Seguidamente, el viernes 17 de junio de 2016 se revelaron los cinco anteproyectos seleccionados para continuar a la segunda ronda de evaluación que se realizó entre el jueves 21 hasta el sábado 23 de julio de 2016.
Los jurados encargados en la segunda ronda fueron Rodolfo Ulloa Vergara, Alfonso Cabrera Cruz y Daniel Bermúdez Samper, Elías Cisneros Ávila y Alain Guilhot.
Tanto en la primera como en la segunda ronda, el proceso de selección del Concurso fue anónimo, por lo que los anteproyectos fueron identificados con códigos y con los datos de sus diseñadores que se encontraban en sobres sellados depositados en una urna bajo llave.
Finalmente, la ronda final estuvo bajo la aprobación de expertos en iluminación arquitectónica como Alain Guilhot, de Francia, y Elías Cisneros Ávila, de México, junto a los arquitectos colombianos Rodolfo Ulloa Vergara, Alfonso Cabrera Cruz y María Teresa Sierra, quienes estudiaron las cinco propuestas finalistas y el viernes 29 de julio abrieron la urna y revelaron la identidad del ganador.
CRITERIOS DEL CONCURSO
Para la evaluación de las propuestas, el jurado tuvo en cuenta como criterio básico general la unidad e integridad de la propuesta arquitectónica de iluminación con la condición de Bien de Interés Cultural (BIC) del ámbito nacional del Castillo de San Felipe de Barajas, así como las facilidades para la accesibilidad, movilidad y seguridad proporcionadas por la iluminación propuesta.
Además, que la propuesta respondiera a criterios particulares tales como funcionalidad, factibilidad, racionalidad económica, sostenibilidad, integración estética e imagen urbana, equipamiento tecnológico y recursos informativos.
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