Indignados y molestos, así se encuentran los cartageneros especialmente los residentes de Getsemaní, por varios aires acondicionados y un extractor de calor que instalaron en el cordón amurallado del sector El Pedregal.
Lo que llama la atención de la comunidad, es que los artefactos cuentan con el aval de la Escuela Taller Cartagena de Indias (ETCAR), entidad encargada de las fortificaciones de la ciudad por designio del Ministerio de Cultura.
Miguel Caballero, presidente de la Asociación de Vecinos de Getsemaní, manifestó su preocupación ante la situación, ya que no se explica cómo una entidad del gobierno, que debe cuidar y velar por el patrimonio, atente contra este.
Según indicó, los aires y el extractor están instalados desde diciembre y hacen parte del restaurante ‘El blinde’, el cual fue inaugurado por la ministra de Cultura, Carmen Vásquez Camacho.
Para la fecha, se desarrolló el IX Encuentro Nacional de Patrimonio, cuyo enfoque fue dedicado a la ‘Diáspora Africana en Colombia’.
De acuerdo con el Ministerio de Cultura, “el restaurante es un proyecto piloto que impulsa la recuperación y salvaguardia de la cocina tradicional afrocolombiana. Además, visibiliza la memoria viva de las tradiciones culinarias locales donde confluyen rasgos históricos de una tradición milenaria”.
Sin embargo, Caballero afirmó que la comunidad getcemanicense no está de acuerdo con dichos artefactos porque, además de que visiblemente se ven mal, no es el lugar apropiado para instalar unos aires acondicionados.
“Lo que nos molestó también fue que la Escuela Taller convocó a una socialización un día de semana a las 3 de la tarde, hora en la que nadie por cuestiones laborales puede asistir, y cuando llegué, 15 minutos después, me dijeron que la reunión ya se había acabado”, expresó.
Asimismo, indicó que el restaurante había instalado un quiosco, pero fue desmontado a los pocos días por petición de la comunidad.
Escuela Taller responde
Mario Zapateiro, director de obras de la Escuela Taller, explicó a este medio que las dos bóvedas tenían un sistema de desfogue para que no concentrara la humedad, por ende al meterle la actividad de la cocina, se requería que la cocina tuviese un sistema de extracción de calor óptimo para que no fuese un horno, y por eso fue instalado el extractor.
Además, manifestó que el control del extractor se está haciendo con todo el mantenimiento óptimo que requiere para que el Invima no lo eche para atrás.
Finalmente, puntualizó que al extractor se le hará un recubrimiento similar al que tuvo en su época y no va a quedar así como se ve actualmente.
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