Con ilusión, espera que la pandemia de COVID-19 pase pronto para así volver a ponerse sus guantes azules y hacer una de las cosas que más le gustan: boxear.
Tiene tan solo 13 años de edad y ya posee seguidores en Aguas Negras, un corregimiento ubicado a pocos minutos del casco urbano de San Onofre.
Aunque se concentra en sus estudios, aveces le dan ataques de ansiedad y se imagina nuevamente dentro del ring, rodeada de cientos de personas que la animan.
Y es que toma el celular de su madre para enviar resueltos los talleres que sus profesores de Séptimo Grado le mandan por Whatsapp, y aprovecha para observa una y otra vez aquel video. Es la única evidencia que le quedó de su primera pelea, realizada en una velada boxística con escenario en la plaza principal el sábado 30 de noviembre de 2019, fecha que no olvidará jamás.
Se abstrae, y en el material audiovisual repasa cada uno de los puños que lanzó aquella tarde, deleitándose con la magia que solo los gladiadores experimentan.
También ora a Dios para que acabe el confinamiento y su padre vuelva a entrenarla y hacer reuniones boxísticas mostrándola como lo que se siente, una futura campeona.
Ella es Cruz María Bello Moguea, hija de Araida Moguea Silgado y Remberto Bello Ávila, este último considerado uno de los mejores boxeadores colombianos de la década de los noventas en amateur.
Cruz María nació en Venezuela, donde su padre estuvo viviendo más de 25 años y hace 8 meses regresó a su natal Aguas Negras, donde reactivo el boxeo, pero el virus lo volvió a parar.
La nueva exponente del pugilismo está en “receso obligatorio”, pero aprovecha para alimentar su sueños de llegar a lo más alto y alcanzar un título mundial en nombre de Colombia y Venezuela.
Comentarios ()