Todo estaba previsto para que el alcalde William Dau Chamatt llamara al Concejo Distrital a un tercer periodo de sesiones extras, luego que los miembros del cuerpo edilicio terminaran el 10 de agosto pasado su segundo periodo de sesiones ordinarias.
Uno de los proyectos por los que citaría a sesiones a los miembros del Concejo estaba relacionado con la incorporación de más de 20 mil millones de pesos para realizar trabajos que permitieran concluir la construcción de cuatro hospitales y una UPA, para así beneficiar a los cartageneros en medio de la crisis en el sector salud generada por la propagación del COVID.
Se trata de obras que fueron contratadas en la administración de Dionisio Vélez, luego de un préstamo que este hizo por $250 mil millones en el año 2014. Una de las obras corresponde a la UPA de Daniel Lemaitre y las otras son los CAP de Bayunca y Barú, así como los hospitales de El Pozón y Canapote.
Semanas atrás el alcalde de Cartagena señaló que, pese a los presuntos incumplimientos, se “tragaría el sapo” y permitiría que el contratista de estas obras, Coinses S. A., cediera el contrato a otra empresa para que este terminara las construcciones y así poder contar con estos hospitales lo antes posible.
El alcalde utilizó el término de “tragarse el sapo” porque la cesión del contrato significa que el contratista a cargo de las obras, al ceder el contrato, se libraría de responsabilidades en caso de un proceso por incumplimiento.
Sin embargo, el alcalde indicó que no presentará ante el Concejo Distrital el proyecto.
El mandatario confirmó que ha encontrado en el camino varios inconvenientes y que ve demorado todo el proceso para la cesión.
Además, dice que ya pasó el pico de la pandemia en la ciudad y la situación en cuanto a disponibilidad de camas ha mejorado en gran medida.
Por ello, confirmó que ya no hará la cesión del contrato y que este será liquidado, por lo que se pasará a determinar dónde estuvieron las fallas que no permitieron que estos proyectos llegaran a feliz término por el bien de la ciudad.
Será un proceso demorado, pero con ello se esclarecerá qué fue lo que pasó. Tras la liquidación del contrato, el Distrito abrirá un proceso de licitación para escoger a otro contratista que se encargue de terminar las obras de los cuatro hospitales y la UPA.
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