Las adecuaciones que está realizando el Salón del Reino de los Testigos de Jehová, en Torices, no ha sido de gusto para los vecinos, porque según ellos, ha afectado una calle que la comunidad construyó.
Al parecer, la iglesia partió el anden para hacer una rampa que sirva de parqueadero, quitándole espacio peatonal a los transeúntes.
Por eso, desde las primeras horas de este miércoles, los vecinos del sector se plantaron frente a la iglesia para exigirle al pastor respeto a la comunidad, y reparación de los daños.
“Esta calle no la hizo el Distrito, la hizo la comunidad, y como tal estamos exigiendo que nos devuelvan nuestro espacio público, el anden lo queremos como estaba, igualito”, dijo Gregorio Meléndez Gómez, presidente de la JAC Torices sector la Unión.
Además, Meléndez dijo que en esa esquina hay una señora que lleva más de 25 años vendiendo fritos, y los dueños de la iglesia la están desplazando, queriéndole quitar su único trabajo. “No han llegado a un acuerdo con ella, ni tampoco con nosotros como Junta de Acción Comunal”.
“Están haciendo obras ilegales como es la adecuación del espacio público; ellos no cuentan con licencia de construcción, no cuentan con plan de manejo de movilidad. Torices sector La Unión tiene una sola entrada, y los Testigos de Jehová están adecuando el espacio público para sus intereses personales, y va a terminar obstaculizando la movilidad en el sector, por eso queremos que las autoridades en construcción se acerquen al barrio”, manifestó otro habitante.
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