El Decreto 0737 del 15 de julio solo permite a los cartageneros ejercitarse en las playas en medio del confinamiento por el COVID-19 y aunque la mayoría anhela volver a disfrutar de la arena y el agua salada, el Comité de Playas analiza la reapertura de este sector teniendo en cuenta la curva de contagios.
“Todavía no se pueden reabrir las playas de la ciudad teniendo en cuenta que el nivel de contagio es muy variado. Allí tenemos el ejemplo de otras ciudades en el mundo que se adelantaron en este proceso y reportaron un aumento considerable en el número de casos positivos. Por eso aún se evalúa este posible plan piloto”, explicó David Múnera, secretario del Interior.
De acuerdo con Múnera, contemplar una reapertura de playas después de cinco meses de aislamiento estricto puede resultar contraproducente. “El tema sigue en estudio en el Comité de Reactivación Económica porque son muchos factores que hay que tener en cuenta. Las playas son un lugar de esparcimiento para los ciudadanos y más si vienen después de cinco meses de permanecer en casa”.
Hasta la fecha son varias las reuniones que adelantan las autoridades distritales mientras el protocolo propuesto por la Dirección General Marítima (Dimar) espera la aprobación del Ministerio de Salud. Lea: “Apertura de playas depende de Bogotá”: Múnera
Al respecto, el pasado 18 de agosto esta entidad participó en un recorrido realizado en Bocagrande y La Boquilla, sectores que podrían ser escogidos para poner en marcha los pilotos de la reapertura.
La visita fue realizada en el sector ‘El Bonny’ y en Playa Azul, recorrido en el que también participaron la Gerencia de Playas de la Alcaldía, Corpoturismo, Distriseguridad y la Policía de Turismo.
Múnera señaló que la posible reapertura se evalúa en una mesa técnica liderada por la Secretaria de Planeación, Interior y un representante del Ministerio de Industria y Turismo.
Ordenamiento de playas, clave
La puesta en marcha de un plan piloto para la reapertura de playas puso en la lupa el ordenamiento de estos balnearios en Cartagena. Dicho proceso incluye las inspecciones técnicas, propuestas de zonificación y solicitudes de restitución para la protección de estos bienes de uso público.
El Universal conoció que se está trabajando en la recuperación de estos espacios a través de procesos policivos.
Además, es indispensable culminar el proyecto que arrancó en abril de 2017 que apunta a reglamentar las playas y combatir la informalidad en el sector turístico.
El protocolo
La Dirección General Marítima (Dimar) presentó una propuesta de protocolo sujeta a revisión del Ministerio de Salud para avanzar en la reactivación de las playas teniendo en cuenta que estas se consolidan como un gran atractivo en Cartagena.
En la propuesta se destacan las siguientes medidas:
Adecuación
- Definir capacidad de carga de las playas de tal manera que a cada persona le corresponda un espacio de 10 metros cuadrados.
- Demarcar un punto de entrada y salida y hacer control de temperatura para el ingreso.
- Definir áreas para lavado de manos.
- Puntos de suministro de alcohol glicerinado cada 100 metros.
- Definir sitio de aseo y desinfección fuera de la arena.
- Limitar los parqueaderos al 50% y desinfectar los vehículos.
Interacción en la playa
- Distanciamiento mínimo de dos metros entre trabajadores y usuarios.
- Están prohibidas las aglomeraciones y eventos como conciertos y deportes de playa.
- Evitar el intercambio de equipos de trabajos.
- Prohibir las ventas ambulantes. Lea: Así sería el protocolo para la apertura de playas
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