El Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales (Ideam) declaró este jueves en estado de “advertencia” al archipiélago de San Andrés y Providencia ante el eventual paso de una onda tropical que podría alcanzar la categoría de huracán entre la noche del próximo sábado y la mañana del domingo.
“El Ideam ha declarado en categoría de advertencia al archipiélago de San Andrés y Providencia por un fenómeno climático que puede llegar a convertirse en huracán el fin de semana”, dijo la ministra de Ambiente y Desarrollo Sostenible, Susana Muhamad.
El “estado de advertencia” significa que se empiezan a preparar las medidas de emergencia para los puertos, manejo del hospital de San Andrés, como también el fortalecimiento de refugios.
El IDEAM participa #AEstaHora en @UNGRD en el Comité Nacional para el manejo de desastres permanente, informando que el potencial ciclón tropical continúa su paso al occidente y sobre el aumento del nivel de alerta de advertencia de huracán para el archipiélago de San Andrés. pic.twitter.com/eqzkUTOFrL
— Ideam Colombia (@IDEAMColombia) October 6, 2022
La funcionaria agregó en un comunicado que, “por lo tanto, se está realizando un simulacro de huracán en la isla” y ya se reunió el Comité de Emergencias “para empezar a hacer la preparación independientemente si esta depresión tropical se torna realmente en un huracán o no”.
Por su parte, el director de la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (Ungrd), Javier Pava, explicó que “de acuerdo con la evolución del sistema, mañana viernes estaríamos conectados nuevamente con los consejos municipales”.
Puntualizó que en Providencia se deben utilizar los refugios que ya se encuentran construidos. Entre las recomendaciones dadas por la Ungrd está el alistamiento para responder de manera eficaz frente a la tormenta o huracán.
El posible paso del huracán genera eventos como fuertes vientos, tormentas eléctricas y oleajes por encima de lo normal.
Durante la noche del 15 y la madrugada del 16 de noviembre de 2020, el huracán Iota de categoría 5 arrasó con la isla de Providencia, cuya infraestructura se dañó en un 98 %, cuatro personas murieron y más de 5.000 personas resultaron damnificadas.