Consumir agua es vital y necesario. Las autoridades de salud recomiendan el consumo de ocho vasos al día para una correcta hidratación acompañado de una dieta rica en verduras y frutas. Lea: Beneficios del consumo de agua
“La mayoría de las personas sanas pueden mantenerse hidratadas bebiendo agua y otros líquidos siempre que sientan sed. Para algunas personas, menos de ocho vasos al día puede ser suficiente. Pero otras personas pueden necesitar más”, explican desde la Clínica Mayo (Estados Unidos).
Expertos de la Clínica Mayo.
Otros expertos señalan que una de las razones para el consumo de agua es que este líquido es una de las principales sustancias que componen el cuerpo. Lo cierto es que a la hora de acompañar las comidas, el agua es la opción que eligen muchas personas. Lea: Los beneficios para la salud de bañarse con agua fría, ¿te le mides?
Pero, ¿beber agua durante o después de una comida altera o afecta la digestión? Expertos de la Clínica Mayo aclaran que no existen motivos para pensar que el agua disminuya o rebaje (diluya) los jugos digestivos o interfiera con la digestión. De hecho, tomar agua durante o después de una comida ayuda a que el cuerpo descomponga y procese los alimentos (digestión).
“El agua es vital para una buena salud. El agua y otras bebidas ayudan a descomponer los alimentos para que el cuerpo pueda absorber los nutrientes. El agua también ablanda las heces, lo que ayuda a evitar el estreñimiento. Elige agua en lugar de bebidas con mucho azúcar cuando sea posible”, aconsejan. Le puede interesar: Ola de calor en Cartagena causa dolores de cabeza más fuertes: experto
Los expertos de este instituto advierten que para facilitar la digestión es indispensable comer frutas, verduras y granos integrales. Además es importante incluir productos lácteos bajos en grasa o sin grasa, como la leche y el yogur, y las carnes magras.
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