La Semana Mayor es tiempo de reflexión, compartir en armonía y buscar de Dios, pero en el barrio El Pozón lo que ocurrió durante estos días está muy lejos de eso.
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Llegaron los sicarios
En muchas películas colombianas vemos a los sicarios haciendo el “raro” alarde de su devoción y respeto a Cristo, la virgen, los santos y la fe católica en general; por eso se podría pensar que respetarían la Semana Santa, pero el miércoles, a eso de las 7 de la noche, aparecieron en una calle del sector Isla de León y le dispararon a quemarropa a Wilson Romero Amaya.
Lo que se sabe es que la víctima estaba cerca de un lugar donde hacían un culto cristiano, cuando aparecieron los matones en moto y le dispararon.
De inmediato, pastores y otras personas que estaban en el acto religioso lo llevaron a una clínica, pero murió a los pocos minutos. La Policía investiga el crimen pero maneja la hipótesis de un ajuste de cuentas ya que Romero, al parecer, tenía anotaciones por tráfico de drogas y hurto.
Vecinos y enemigos
En la noche del Viernes Santo, cuando se conmemoraba la Pasión y Muerte de Jesús, en el sector La Unión se paseó el diablo.
Al parecer, una riña dejó un muerto y varios heridos, uno de ellos un patrullero de la Policía Metropolitana. Hay dos versiones sobre el hecho, la primera habla de una pelea entre dos vecinos por un malentendido. Ocurrió a las 8:20 de la noche.
Según, los hombres discutieron y luego, uno de ellos buscó un arma de fuego y le disparó al otro, identificado como Justino Urbina Pedroza y que murió en el lugar de los hechos. Familiares y amigos de la víctima se fueron contra el vecino, a quien conocen con el apodo de ‘el Flaco’ y este les disparó indiscriminadamente, dejando varios heridos.
De inmediato llegaron patrulleros de la Policía y el hombre con el arma se dio a la huida por las calles del sector pero fue perseguido. En medio de la persecución le disparó a un uniformado que ahora se encuentra en un centro médico.
La segunda versión habla de una riña entre varias personas, en medio de una fiesta callejera. Supuestamente víctima y victimario estaban consumiendo licor y luego protagonizaron una pelea a golpes, acto seguido entraron a la confrontación otras personas. En medio del pleito un sujeto sacó un arma de fuego y le disparó a Justino, quien murió al instante, luego hirió a otras personas. De inmediato escapó del sitio pero notó que dos policías lo perseguían en una moto, entonces les disparó, baleando a uno. El presunto agresor está capturado.
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