La sola idea de pensar en el “Día sin moto” (o “Día sin parrillero”) pone a Luisa Peralta* de mal humor. La joven de 25 años, que debe atravesar la ciudad de “punta a punta”, expresa que ese día la “ciudad colapsa”, no se consigue transporte y el Sistema Integrado de Transporte Masivo (SITM) “pasa más lleno y tarda más”.
El sentir de Luisa se replica en otras tantas voces de ciudadanos en redes sociales que solicitan al gobierno de William Dau revaluar la medida, que quedó establecida en el Decreto 0279 del 25 de febrero de 2022. Lea: Siete puntos para entender el nuevo decreto para motos en Cartagena
El decreto estipula que el segundo y el último viernes de cada mes será día sin moto en la ciudad y se aclara que solo pueden circular las motocicletas conducidas por sus propietarios y sin parrilleros. Infringir esta norma acarrea una multa de 15 salarios mínimos diarios legales vigentes y la inmovilización de la motocicleta.
Sin embargo, no paran las quejas de los ciudadanos que califican la medida como ineficaz y no funcional. Le puede interesar: En el “Día sin moto”, sicarios matan a un hombre en San Pedro Mártir
Opinan expertos
Daniel Toro González, economista e investigador en temas de transporte de la Universidad Tecnológica de Bolívar, sostiene que, como política pública, la medida del “Día sin moto” carece de sustento.
“No hay beneficios claros de lo que se persigue con la medida y no se conoce ninguna evaluación de impacto de la misma. Por el contrario, lo que se percibe es que afecta negativamente a gran parte de los cartageneros”.
Daniel Toro.
Ramón Torres Ortega, ingeniero civil con maestría en vías terrestres y docente de la Universidad de Cartagena, explica que las autoridades, en cabeza del Departamento Administrativo de Tránsito y Transporte (DATT), deben revaluar la medida y realizar los ajustes necesarios.
“Cada vez que se propone una medida como esta debe haber de forma obligatoria una prueba experimental y después un seguimiento para que las autoridades, en especial el DATT, puedan dar validez a las decisiones que en determinado momento se toman a través de un decreto”.
Ramón Torres.
Asimismo, deja claro que la medida del día sin moto causa afectaciones en la movilidad por el desequilibrio entre la oferta y la demanda en el tema del transporte público.
“Pese a que el día sin moto se les permite circular a los propietarios, el problema es que el tránsito en la ciudad colapsa muy por encima de lo que se observa en los días normales en que las motos pueden circular con las restricciones de pico y placa. El servicio de transporte público masivo no es suficiente; es decir, hay un claro desequilibrio entra la oferta y la demanda, lo que causa más trancones en horas pico”, explicó.
Habla el Distrito
En diálogo con El Universal, la secretaria del Interior, Ana María González-Forero, señaló que revaluar la medida se torna “complejo” porque se trata de regular un servicio de transporte ilegal.
“Es una decisión difícil porque sin duda es complejo, si uno está tratando de fomentar una cultura de la legalidad en unas cosas, aceptar de manera tan tajante que esta forma ilegal de transporte sea la que impera en la ciudad”, dijo.
No obstante, destaca que el día sin parrillero sí favorece a Transcaribe como “activo importante que hay que proteger” en la ciudad.
“Sé de los impactos económicos favorables que tiene la medida sobre el transporte masivo y creo que es algo que debemos defender todos los cartageneros. La situación financiera de Transcaribe es bastante grave y sería una lástima perder este sistema después de todos los esfuerzos económicos y físicos para que se construyera”.
Agregó que continúa en conversaciones con la dirección del DATT con relación a esta medida.
*Nombre cambiado a petición de la fuente
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