Para muchos cartageneros disminuyó el temor de que ocurra una emergencia en el Salto del Cabrón, donde está una roca de gran tonelaje que soporta el convento que está en la punta del cerro de La Popa, la cual está fracturada.
Aunque por este caso fue declarado un estado de calamidad pública y se hicieron estudios geotécnicos, solo hasta este año el Distrito concretó trabajos en firme que permitan disminuir el riego en el cerro. El Universal conversó con el ingeniero Javier Martínez Páez, representante de la empresa PyP Limitada de Bucaramanga, quien coordina estas labores.
“Se están haciendo unas perforaciones para estabilizar el talud del Salto del Cabrón. Esas perforaciones se hacen por medio de unos taladros neumáticos y son de aproximadamente 24 metros de longitud cada una.
“Lo que se coloca dentro de cada perforación, una vez terminado el proceso, son unas guayas con mangueras, lo que es conocido como anclaje, y un tubo por el que se hace una inyección, por el que se introduce agua con cemento para llenar el hueco. En esto se gastan entre 30 y 50 bultos de cemento por cada inyección”, puntualizó Martínez, quien explicó que este proceso lo que hace es formar una especie de masa que, posteriormente, es apretada con una presión de 200 PSI.
“Una vez hecho esto, a los 24 días, cuando se arma la pantalla, se hace una tensión entre 30 y 40 toneladas”, indicó.
El experto resaltó que la primera fase, que constaba de 35 anclajes, terminó, y que en este momento empezaron la segunda fase, que va sobre 60 anclajes con una duración de dos meses, tiempo que podría extenderse por la época de lluvias.
Adicionalmente, resaltó que el personal presente en la obra son perforadores, auxiliares de perforación, trabajadores capacitados y entrenados para trabajos en alturas, ya que por las condiciones del Salto del Cabrón todo se realiza en alturas, a través de un sistema vertical.
Es de resaltar que el proyecto de intervención a La Popa, que fue diseñado por la Universidad de Cartagena, incluye un sistema de terrazas conformado por pantallas pilotes en la parte inferior de las calizas, para protegerlas y evacuar el agua que cae directamente hacia la parte del Salto del Cabrón.
Además, un sistema de anclaje del material calcario que está triturado, con un tratamiento de los drenajes naturales con sistemas de disipadores con gaviones para efectos de controlar el agua que se filtra por esta piedra. Así mismo, protegerán los taludes con cobertura vegetal y en la parte baja se hará una trampa de sedimento.
La primera fase costó $2 mil millones y esta segunda etapa $6 mil millones.
El alcalde (e) de Cartagena, Pedrito Pereira Caballero, a visitado la obra varias veces junto a funcionarios de diferentes dependencias. Respecto a esto, el Distrito dio un parte de tranquilidad.
“Lo importante es que haya tranquilidad, que las obras de La Popa se están haciendo bien. Los trabajos que eran necesarios hacer, empezaron en la temporada seca para que ahora con las lluvias no se afecte el rendimiento, pero las obras se seguirán haciendo sin inconvenientes”, dijo el mandatario.
Comentarios ()